Lorena Capetillo desmiente funa viral tras ser confundida con mujer en Perú
La actriz fue víctima de una falsa acusación en redes sociales por un hecho ocurrido en Lima que involucraba a otra persona con su mismo nombre.
Detalles inéditos del juicio de María Elena Swett, más conocida como Mane Swett, para recuperar la custodia de su hijo se conocieron en las últimas horas.
La cita en la corte comenzó en Nueva York, ciudad de Estados Unidos donde está Santiago, hijo de 11 años de Mane Swett y quien no regresó donde su madre por voluntad del padre.
Cabe destacar que la actriz se traslado hasta Norteamérica para discutir en tribunales la tuición de su hijo con el escritor John Bowe, su ex marido.
Acuerdo legal
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Según reveló, LUN el juicio de Mane Swett en contra de su ex esposo partió el lunes 8 de abril y se conocieron los detalles de la historia.
En busca de recuperar la manutención de Santiago, a quien lleva alejada hace más de un año, la actriz no escatimó gastos en su estrategia legal.
Mane Swett contrató cinco abogados trabajando y en los alegatos se estableció que el niño creció en Chile, vivió con su madre y viajaba dos veces al año a Nueva York para compartir con su padre, que es escritor.
Frente a los tribunales también se expuso que existía un acuerdo legal, que quedó fijado en órdenes de custodia dictadas en 2013 y 2014, en ambos países.
La defensa de Mane Swett se quejó en los últimos 14 meses el niño vivió sólo en Estados Unidos con su papá, "quien, supuestamente, en aparente contravención de estas órdenes, se negó a permitir el regreso del niño a Chile", destacó LUN.
Regreso
En este verdadero vía crucis legal, Mane Swett presentó el 23 de febrero, a través de unos de sus abogados, una Petición de Regreso de Niño en una corte de Nueva York.
Por su parte, el ex esposo de la actriz chilena no se dejó estar y contrató cuatro abogados, que han presentado testigos chilenos que conocieron a Santiago y se ha solicitado al juez la reserva de los datos personales del niño.
Además, Santiago, de 11 años, cuenta con su propio abogado y esa tarea quedó en manos de la profesora Jennifer Baum, directora de una clínica de defensa infantil y que ya ha jugado el mismo rol en otros juicios.
