Andrea Arístegui compartió detalles sobre su historia de amor con su colega Gonzalo Montaner, con quien mantiene una relación de 23 años.
En una entrevista con La Cuarta, la destacada periodista recordó que conoció a su pareja en 2001, durante su práctica profesional en el área internacional de TVN, mientras ya era madre de su primera hija, Javiera.
En ese entonces, estaba completamente enfocada en su trabajo y no buscaba una relación sentimental.
"Estaba súper enfocada en la pega, estaba con mi hija y en el lugar donde siempre había querido estar. Estaba súper concentrada en el trabajo y quería que me dejaran contratada. Era mi gran objetivo. En esa época no salía mucho con la gente del canal ni nada, porque estaba como caballo de carrera, para adelante, tratando de quedarme en TVN. No estaba mucho en la idea de buscar una relación", relató.
Sin embargo, el destino tenía otros planes. Rafael Cavada, compañero de ambos en TVN y amigo cercano de Arístegui, desempeñó un papel crucial como "cupido".
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"Rafa era el periodista con más experiencia. En algún momento quedó como jefe y fue importante en mi primera etapa de práctica: es responsable que yo haya partido haciendo despachos en televisión, se la jugó para que yo fuera a hacerlo", destacó.
"Gonzalo vivía con Rafa, tuvieron ciertas conversaciones, le habló de mí y planearon todo para que en un cumpleaños (de Cavada) pudiésemos conocernos más: había una mesa que no tenía salida, estaba pegada a un muro, quedé en ese espacio, y se sentó a mí lado, conversamos toda una noche y empezó nuestra historia", contó.
Cavada organizó una reunión en su cumpleaños, donde colocó estratégicamente a Arístegui y Montaner juntos en una mesa sin salida, lo que facilitó que conversaran durante toda la noche. Ese encuentro marcó el inicio de su relación.
"¡Ese mismo día Gonzalo me dijo que se iba a casar conmigo! Lo encontré divertido. No sé cómo no me espanté. Era muy chistoso. Recién nos conocíamos, habíamos hablado un par de veces y nos habíamos cruzado en el canal, pero no habíamos conversado como para un pololeo, ¡menos un matrimonio! Lo tomé como un halago, pero nunca imaginé que la historia se haría real. Y aquí estamos, 21 años después", declaró.