Golpe para la U: Marcelo Díaz recibe dura sanción tras impresentable actitud en el Superclásico
El capitán de la U golpeó a sus rivales, le dio un manotazo a Esteban Pavez y realizó un gesto obsceno en medio de la cancha.
Colo Colo fue goleado por 3-0 ante Racing de Avellaneda este sábado en un partido amistoso disputado en el Estadio Monumental.
La máxima figura del encuentro resultó ser bastante conocida para los hinchas del Cacique. Se trata de Santiago Solari, quien aparte de haber anotado un doblete en la cancha de macul es hermano de Pablo Solari, uno de los jugadores más queridos del último tiempo en el club.
Una vez finalizado el cotejo, no tuvo más que palabras de agradecimiento para Colo Colo, equipo del cual quedó maravillado por el estadio y por la hinchada.
"Es especial, mi familia fue feliz acá y si ellos lo fueron yo también lo seré. Es lindo jugar en este estadio tan lindo, me voy contento por eso'', declaró Santiago Solari a ESPN.
''Yo siempre alenté mucho a mi hermano cuando estuvo acá, tuvo un gran paso, y eso él lo recordará siempre", expresó Solari, quien destacó la importancia del apoyo familiar en su carrera.
Síguenos en: 
"Yo nunca vi un partido ni pude visitar a Pablo cuando estaba acá. Me sorprendieron, tienen una gran hinchada. Fue lindo estar aquí con la gente y con algunos jugadores que conocía gracias a Pablo", sostuvo el mediocampista argentino sobre los hinchas que llegaron hasta el Monumental.
Sin embargo, hubo un detalle que no pasó desapercibido en la interna del popular. En un diálogo con chile.as.com, Santiago Solari sorprendió al decir que ''no descarta en vestir la camiseta del popular en un futuro''.
"¿Si en algún momento me gustaría jugar en Colo Colo? Y bueno, no sabemos, yo nunca le cierro la puerta a nadie obviamente. Las vueltas de la vida, así que por ahora estoy tranquilo en Racing, en un gran club en Argentina y estoy viviendo un momento único después de ser campeón de la Copa Sudamericana. Así es que, por ahora, estoy tranquilo", puntualizó la figura de la Academia.
