• 25 ABR DE 2024

Comienza trámite para implementar primera planta desaladora de consumo humano en Coquimbo

agua_potable.jpg | El recurso tiene como objetivo abastecer a la cuarta región de agua de potable, en caso de carencia.

El proyecto presentado por Aguas del Valle busca conservar fuentes de agua potable para ciudades como La Serena y Coquimbo.

Frente a lo que aseguran será una futura crisis hídrica, muchas zonas del país preparan estrategias para resguardar fuentes de agua potable, en caso de no poder solventar el uso para todos los habitantes.

Es por esto que tras más de cinco años de análisis ambientales, estructurales y sociales, Aguas del Valle ingresó un proyecto al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) que tiene como finalidad crear una red de agua potable, implementando una planta desaladora en Coquimbo-La Serena.


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La iniciativa, con miras al futuro, pretende asegurar este valioso recurso para todo el consumo humano de la región, abarcando en primera instancia las ciudades de Coquimbo y La Serena y si es requerido, a localidades exteriores de estas urbes. 

Asimismo, este proyecto permitirá conservar agua para complementarla en caso de que el agua dulce no pueda abastecer toda la demanda. De esta forma, generará en su primera etapa, cerca de 600 litros por segundo, para luego calcular a futuro 1.200 litros por segundo aproximadamente.

Cabe mencionar que esta medida tiene una inversión inicial de US$ 181 millones.

El gerente regional de la empresa sanitaria, Andrés Nazer, afirmó: “Estamos avanzando en una iniciativa clave para contar con una nueva fuente de agua para consumo humano y así tener más alternativas para enfrentar la crítica situación hídrica de nuestra región, que ya supera los 13 años de sequía”

Igualmente el gerente destacó que realizaron una Participación Ciudadana Adelantada para tener conocimiento de las opiniones de los habitantes de la región.

Por último, señaló que se desarrollará otra instancia para saber nuevamente las ideas de los ciudadanos.

“En los próximos meses, de acuerdo con el proceso ambiental, se realizará un proceso de participación ciudadana formal, donde tendremos una nueva instancia para escuchar y dar respuesta a las inquietudes de la comunidad”, acotó Nazer.

En caso de lograrse el proyecto, se estima que habrá un plazo de de entre dos y tres años, para la construcción de la red que conectará con la ciudad de Coquimbo, y de mantenerse la situación hídrica actual, se proyectará erigir la construcción en 2024 para comenzar a funcionar durante el 2026.