Reparar problemas en techumbres, reconocer grietas o espacios por donde se filtren corrientes y equipar espacios abiertos con toldos son algunas de las recomendaciones para enfrentar de mejor manera los próximos sistemas frontales en el país.
Esta semana Chile entrará oficialmente a la mitad del invierno 2023 y los expertos proyectan semanas con precipitaciones abundantes en determinadas ciudades de la zona centro sur del país, pero por sobre todo, bajas temperaturas. De esta forma, eventos como el sistema frontal del pasado fin de semana, podrían repetirse con frecuencia durante el mes de agosto y las primeras semanas de septiembre.
Sin embargo, especialistas nacionales y plataformas internacionales sobre proyecciones meteorológicas, apuntan a que las lluvias durante el mes de junio, al menos para la Región Metropolitana, ya se acabaron. Es por esto que se abre una pequeña ventana sin precipitaciones para poder hacer remodelaciones y arreglos en el hogar y así hacer frente de mejor manera a las inclemencias climáticas que se aproximan el próximo mes.
[caption id="attachment_124724" align="alignnone" width="1200"] SEBASTIAN BELTRAN GAETE / AGENCIUNO[/caption]
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Los sucesivos sistemas frontales que enfrentó el país durante las primeras semanas del invierno, probablemente dejaron al descubierto algunas falencias al interior del hogar que pueden ser solucionadas. Es en este sentido que los expertos hacen algunas recomendaciones para evitar problemas mayores en días de lluvias o bajas temperaturas.
Lo primero es hacer una revisión profunda al techo en busca de goteras o daños en las tejas, aprovechando los días sin pronóstico de lluvias en la Región Metropolitana, para reparar cualquier problema que se presente en esta área.
En esta línea, resulta importante instalar selladores alrededor de puertas y ventanas para evitar la entrada de corrientes de aire frío y mantener el calor dentro de la casa, acción que también permitirá ahorrar en calefacción. Así mismo, se debe hacer una inspección detallada al sistema de calefacción. Éste debe estar funcionando correctamente, por lo que es importante limpiar filtros y realizar mantenimientos periódicos. Si se usan chimeneas o estufas a leña, se debe verificar que estén libres de obstrucciones.
Si bien las bajas temperaturas y las lluvias normalmente alejan de los jardines a las familias que viven en casa, con los necesarios cuidados y algunas compras, estos espacios pueden ser perfectamente ocupados durante los meses más duros del invierno.
Los techos de lona, por ejemplo, se han transformado en una opción sencilla y multifuncional que permite hacer frente a la lluvia y mantener la temperatura durante la temporada de frío, pero también para evitar el impacto del sol de forma directa durante los meses de diciembre, enero y febrero, cuando los termómetros se levan.
Los toldos plegables son una opción económica que pueden ser funcionales en todas las épocas del año y que permiten utilizar espacios como jardines o terrazas de una manera más cómoda, independientemente si hay lluvia, bajas temperaturas o calores fuertes.
De hecho, dada su funcionalidad, los toldos retráctiles se han transformado en una opción altamente cotizada por las familias, ya que entregan las mismas ventajas que los plegables, pero de una forma más flexible a la hora desplegarlos en los espacios.
Los toldos son una muy buena forma de cubrir los espacios abiertos de cualquier lugar que se requiera. Además, son una gran forma de reducir los gastos de energía tanto en invierno como en verano, ya que permiten maximizar el funcionamiento de los aires acondicionados en el interior, evitando que ingrese de lleno la luz solar, pero también son una opción perfecta si llueve mucho, para no perder espacios de esparcimiento en el hogar.
Además de estas herramientas pensadas en los exteriores, y con el fin de mantener dichos espacios en óptimas condiciones, también se recomienda asegurar que el sistema de drenaje alrededor de la casa esté en buen estado para evitar inundaciones o acumulación de agua, así como también elimina hojas, suciedad y obstrucciones de las canaletas y desagües para permitir el flujo adecuado del agua de lluvia.
