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El potro de Oro y Tirano medirán sus fuerzas en el primer aniversario de la empresa Big Lucha de México
“Caerá máscara o cabellera”. Con esa sugerente invitación, este 1 de julio (20 horas en Ciudad de México), se vivirá el primer aniversario de la empresa Big Lucha de México, con dos nombres que llaman la atención en el evento estelar: El potro de Oro y Tirano. Pero lo mejor de todo es que ambos astros son chilenos, y serán parte del plato fuerte junto a otros luchadores, como Bandido, Flamita, Gravity, Viajero, Sussy Love, Yutani, Limbo y Lady Maravilla. Estos talentos locales cumplirán una etapa demostrando que el talento de la lucha nacional puede brillar en uno de los mercados con más tradición del medio.
A considerar antes de subirnos al ring: Adam “el Potro de Oro” lleva 8 meses en el medio mexicano, tras haber destacado en las promociones de Clandestino, Ngen y CNL, ser parte de la Yeyos Dojo de Guanchulo (en Chile) y haber aprendido mucho de XL y Taylor Wolf (ambos con etapas en la lucha internacional), algo que le marcó una buena senda para ir a jugársela al exigente ruedo mexicano.
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— La Hora (@DiarioLaHora) June 29, 2022
Por la otra parte, Tirano comenzó en Legión Lucha Libre, donde estuvo un año y medio, para luego preocuparse de su profesión como instructor de educación física y sacar la maestría en México, donde una vez cumplida esa etapa, se dijo: “Ahora sí quiero dedicarme 100% a la lucha”, hecho que le tomó 4 años para estar a un adecuado nivel de exigencia.
Ambos buscaban un sueño; El Potro recuerda que “venía por 2 semanas, tenía el ticket de vuelta en la mano... decidí quedarme, probar suerte y ya voy para los 8 meses acá”. Mientras que a Tirano se le ha hecho nada el tiempo estudiando con Ricky Marvin y jugándosela en compañías del medio azteca. Y en algo que ambos están de acuerdo, es en que “acá entrenemos varias veces al día, hasta 4 veces, 6 veces a la semana, teniendo en algunos meses dos luchas a la semana o más”, define El Potro. Pero claro, lo mejor de todo es compartir, aprender y luchar con estrellas de marca mundial, como Rey Fénix, Kalisto, Dragon Lee, Flamita y muchos más.
Para los astros nacionales, algo que no se podía perder eran las raíces, pero al mismo tiempo había que construir los personajes que iban a subirse al ring, así Tirano rememora que “decidí salir como en el pedagógico (Chile) un día viernes, con ese espíritu. Con la cumbia en la sangre”. Acto que le funcionó perfecto, gustó, marcó la diferencia y llamó la atención lo suficiente, tanto así que los fans comenzaron a preguntarle “¿qué canción esa con la que sales?”, hecho que hizo que se conociera en estas tierras lejanas a Chico Trujillo y “La fiesta de San Benito” y actualmente su tema más utilizado como luchador, “Las cumbieras y los cumbieros”, de Santaferia.
Por otra parte, Adam, El Potro venía con su estilo rudo, tenía que salir a luchar, sonó de fondo su tema “El Sinaloense” de Valentín Elizalde, tomó un sombrero, se lo puso y ahí nació El Potro de Oro.
Así, de a poco, empezó el recorrido que llevó a que se empezaran a enfrentar entre ambos en el ring, ya que tal como lo explica Adam, “yo vine como rudo (malo) todo el tiempo, en cambio Tirano pasó de rudo a técnico (bueno) y eso para mí es raro. Tenía que decírselo y ahí comenzaron los problemas”. Tirano tiene su propia visión de los hechos: “Venía como rudo (desde Chile), pero generé tal empatía con el público que pasé al lado de los técnicos”. Ese tránsito fue recriminado y es lo que los ha llevado a ser parte del evento estelar de la Empresa Big Lucha y con una estipulación especial de “máscara o cabellera”, que tiene demasiada importancia en el mercado, y que el Potro lo ejemplifica de manera brutal: “una mascara o una cabellera vale 10, 15 veces más que un campeonato”.
Los eventos de Big Lucha actualmente se pueden ver a través del Facebook de Big Lucha MX y de su canal de Youtube Big Lucha y también por la plataforma de Más Lucha: . Algo verdaderamente imperdible, que sea cual sea el desenlace traerá repercusiones en el ambiente, pero algo que claramente ya es un hecho hoy y siempre.
El Potro adelanta que “soy muy creyente y hay que perseguir los sueños”; visión que claramente le ha traído sus beneficios, pues pese a estar echando de menos a la familia en Chile y sin certeza de cuándo va a volver; pero por mientras, ambos están trabajando también en su gimnasio (como coach y como administrador), siempre van a mantener el espíritu chileno: “colocando de fondo un play list de cumbia y música que para nosotros (chilenos) es de fin de año, pero que acá colocamos todos los días” cierra Tirano.
