ENTREVISTA l "Su objetivo es humillarme": Carmen Tuitera acusa a Guillermo Maripán de manipulación sicológica

Todo partió como un relación virtual entre Carmen Castillo, más conocida como "Carmen Tuitera" y el seleccionado nacional, Guillermo Maripán, y según ella misma ha confesado "fui yo la que lo empezó a jotear".

Ahí nació una "conexión muy especial", y en "Only Fama" la influencer confirmó que ya ambos se conocían de manera personal.

Hasta ahí todo marchaba de manera normal, hasta que Maripán se enteró que "Carmen Tuitera" había vuelto con su ex pareja.

Ahí el jugador del Torino habría reaccionado de la peor manera difundiendo fotografías de carácter erótico, que Castillo reconoció haber enviado.

Tras esta filtración la afectada decidió tomar acciones legales, y con ello se desató una pugna entre ambos que recrudeció la semana pasada, cuando "Carmen Tuitera" aseguró que Maripán le había comentado que se haría expulsar en la Selección, para poder visitarla en Santiago. Algo que el deportista descartó de manera inmediata tratándola de "la señora que tiene familia y marido".

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En conversación con La Hora, Castillo decidió responder al formado en Universidad Católica asegurando que "la frase original fue: '¡Para la casa, señora, que tienes familia y marido!', como si el hecho de tener hijos o una pareja implicara automáticamente quedar excluida de cualquier otra actividad fuera del hogar. Quiero aclarar que no estoy casada, y que al momento de esas conversaciones, llevaba más de dos años separada del padre de mis hijos".

Luego agrega que "este tipo de comentarios no solo son ofensivos: refuerzan estereotipos dañinos que limitan a las mujeres al ámbito doméstico, como si no fuésemos capaces de ejercer autonomía sobre nuestras vidas o participar activamente en otros espacios. Me parece especialmente triste que quien hace este comentario no valore a las mujeres más cercanas de su propia vida, como su madre o su hermana, que, como yo, también han luchado desde sus propios lugares".

"La señora que tiene familia y marido": Guillermo Maripán se defendió de acusación de Carmen Tuitera

La influencer denunció que el futbolista planeaba hacerse mostrar una tarjeta amarilla para quedar libre de la Roja e ir a visitarla.

"El fútbol, como deporte y como comunidad, ha hecho esfuerzos importantes por erradicar el machismo: promoviendo la equidad de género, mejorando la cobertura mediática del fútbol femenino y rompiendo el silencio frente a situaciones de violencia. No creo que clubes como Universidad Católica o Torino avalen este tipo de exposición cruel e injusta de mi vida personal, ni el hostigamiento sistemático que he vivido por parte de terceros, amparados en rumores, estigmas y violencia simbólica", continuó.

- ¿Por qué crees que Maripán se da el tiempo de responderte y dejarte mal parada?

- Creo que la humillación es una herramienta que, lamentablemente, muchas personas usan para invalidar al otro, y es algo que viven tanto mujeres como hombres en distintos ámbitos de su vida. En mi caso, me preocupa profundamente que, en lugar de hacerse cargo del daño que esto ha causado, él prefiera minimizar la situación o responder de forma que me desacredite públicamente.

Lo más grave es que mientras todo esto ocurre, yo he pedido —por mi seguridad y la de mis hijos— que intervenga y frene a la mujer que lo representa, quien afirma tener contacto directo con sus abogados y actúa con total libertad para hostigarme y difundir mentiras.

Desde que se presentó la querella, lo único que ha hecho esta situación es escalar, en vez de canalizarse como corresponde: a través de la justicia. Pero eso se ha vuelto casi imposible cuando tengo que enfrentar un hostigamiento constante, con un claro objetivo de humillar y de revictimizarme.

Las personas tenemos límites. También sentimos indignación y también tenemos derecho a defendernos. Lo que está ocurriendo parece parte de una estrategia orquestada por dos personas que creen que no habrá consecuencias, y que pueden actuar impunemente. Pero revictimizar a alguien no solo es violento: es también profundamente irresponsable.

-  ¿Qué podrías agregar respecto a lo que exhibiste sobre Guillermo Maripán y su plan para salir de la selección y poder visitarte?

- Mi intención al mostrar esos mensajes fue evidenciar que existía una conexión mutua y un acuerdo entre ambas partes. Si bien no teníamos una "relación formal", sí existía consentimiento y voluntad compartida de mantener ese vínculo.

Esto resulta importante porque una de las estrategias utilizadas —por su vocera, por personas cercanas a él e incluso por el propio Guillermo Maripán— ha sido instalar la idea de que nunca me habló, ni tuvo interés en mí.

Los chats que compartí corresponden a dos días distintos de la semana: el primero en jornada de entrenamiento, y el segundo justo después de que él terminara un partido. Es decir, son interacciones reales, en momentos concretos, que reflejan reciprocidad.

Hacer creer que una mujer está inventando o fantaseando con una relación que no existió es una forma de manipulación psicológica conocida como gaslighting, en la que alguien —usualmente desde una posición de poder— busca hacer que la otra persona dude de su percepción o su memoria.

Esta práctica no solo afecta emocionalmente a quien la sufre, sino que también daña su credibilidad frente al entorno. Por eso decidí visibilizarlo: porque callar frente a eso también es una forma de validarlo.

- ¿Qué opinión tienes hoy de Guillermo Maripán?

- El 5 de enero recibí el primer mensaje de una mujer que quería "funar" a Guillermo Maripán. Ese mismo día rechacé de plano esa idea y le respondí que, aunque su comportamiento había sido errático en ocasiones, nunca había tenido una intención directa de dañarme, y por eso yo tampoco lo dañaría a él.

Sin embargo, el 17 de enero supe que él había intentado enviar un video íntimo a un portal de farándula, además de difundir una conversación mía, sacada de contexto, sobre una mujer respecto de la cual él mismo me había entregado información. Así de fuerte ha sido todo esto.

Aun así, creo que siempre estamos a tiempo de demostrar grandeza. Que cometer errores es humano, pero también lo es pedir disculpas sinceras y hacerse cargo del daño causado. Esto no se trata de ganar o perder: se trata de crecer.

Me duele profundamente tener que defenderme de alguien que llegué a valorar mucho, y cuya actitud hoy se aleja completamente de la persona que conocí. Como padre de una hija, él también tiene la responsabilidad de contribuir a un mundo más justo, donde ni ella ni mis hijos tengan que vivir situaciones como esta.

Estoy segura de que su madre no estaría de acuerdo con que haya intentado difundir un video íntimo mío, ni con todo lo que ha ocurrido después. Su familia siempre ha sido un gran apoyo para él, creyendo en su camino incluso cuando otros no lo hicieron. No encuentro justo que también ellos estén expuestos a este tipo de conflicto.

Yo podría inventar que él fue una mala persona conmigo, pero no sería cierto. Ambos nos acompañamos en momentos difíciles y estuvimos presentes cuando el otro lo necesitó. Tuvimos diferencias, como ocurre en cualquier amistad, pero simplemente estábamos en momentos distintos de la vida. Eso no debería habernos convertido en enemigos.

Solo quiero pedirle que detenga a Natalia Casas-Cordero. Esta situación se ha salido de control y, honestamente, tengo miedo, especialmente por la seguridad y tranquilidad de mis hijos.