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Un divertido pero tenso momento se vivió en el último capítulo de "Palabra de Honor", y que tuvo como protagonista al siempre conflictivo Fabio Agostini.
El hecho tomó lugar cuando la comandante Arratia se presentó frente a los reclutas, al interior de la casa, para poder revisar de manera exhaustiva las barracas.
Cuando todos estaban abandonando la zona de las habitaciones, el español se acercó hacia su superiora, y le dio un beso en la mejilla mientras la levantaba del suelo.
La superiora de Agostini de inmediato le lanzó una dura advertencia: "Oiga, suélteme. Última vez que me toca, no me toque. ¿Estamos?".
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"El rancho está ordinario, picante. El servicio es completo, es servir rancho y después tiene que ordenar", le cuestionó Arratia, respecto de sus deberes al interior del reality.
Debido a sus faltas, el nacido en las Islas Canarias debió realizar 30 lagartijas frente a todos sus compañeros, a modo de castigo.
Más tarde, la comandante notó que la cama de Fabio estaba mal hecha, pues había colocado el cobertor por el lado verde, y no por el naranjo, que es el que corresponde.
De inmediato, Arratia procedió a desarmarle la cama para que la volviera hacer, no sin antes recalcarle que las reglas del encierro debían cumplirse al pie de la letra.
