"Pase lo que pase": Daniel Fuenzalida lloró y dio de su bolsillo dinero a sufrida participante de Ahora Caigo
El caso de Andrea Harboe, cuidadora de su hermana y su madre, emocionó hasta las lágrimas al Ex Huevo.
El chef español Sergi Arola lleva ya más de años viviendo en nuestro país, donde se ha establecido felizmente.
Y uno de los motivos, si no el principal, que lo han llevado a radicarse en el país es su mujer chilena, Francisca Larêe, de profesión enfermera, cuya pasión por las motos y el rock prendieron la chispa de la relación, como contó el propio chef en el episodio de "La Divina Comida" en el que participó hace un tiempo.
De su feliz relación habló el español y también de la increíble conexión que tiene su esposa y sus dos hijas, fruto de su primer matrimonio.
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El uno para el otro
“La verdad es que la nuestra es una relación de almas gemelas, para mí Fran es todo, absolutamente todo, es mi sostén, mi inspiración, es mi vida", se explayó el chef respecto a cómo se lleva con su compañera, en conversación con Tiempo X.
"Seguimos peleándola, yo apoyándola en todo lo que se pueda en su trabajo, ella también me apoya en mí en mis proyectos y en todo lo que se viene gastronómicamente”, expresó.
Respecto al modo como compatibilizan los tiempos de ambos, el cocinero comenta: "Nos conocimos así, yo ya grababa y ella ya se desempeñaba en esto (como enfermera), entonces desde el principio tratamos de amoldarnos y de disfrutar un tiempo cualitativo. Nos gustaría, tanto a ella como a mí, tener un tiempo cuantitativo, pero a falta de eso, peleamos para tener calidad", confidencia.
Pero es cuando habla de sus hijas, Carla y Ginebra, qué el chef no puede disimular su orgullo. Las jóvenes tienen un lugar importantísimo en su vida, y Sergi comentó sobre cómo mantiene el lazo con ellas.
Papá chocho
"Mis hijas toda la vida me han conocido trabajando en el restaurante, están más que acostumbradas a lo que ha sido tradicionalmente los horarios de su padre, que son complejos para compartir con tu entorno. Siempre he me sentido apoyado por parte de ellas”, relató.
"Ellas ya son mayores, tienen vocaciones muy intensas y que además me enorgullecen especialmente, porque las dos se dedican a hacer el mundo un poquito mejor", refiere el orgulloso padre.
"Mi hija mayor es criminóloga y ahora está estudiando psicología y me gusta presumir, ahora está de jefa de un proyecto de reinserción de presos y me emociona. La pequeña está estudiando trabajo social. Me siento muy orgulloso”, afirma Sergi Arola.
