El comediante relató que en sus inicios debió desempeñarse en un hotel parejero para generar ingresos que le permitieran pagarse los estudios.
El standupero laboró como recepcionista de un motel de mala muerte en Santiago Centro, donde incluso no cambiaban las sábanas y sólo les echaban desinfectante.
Rodrigo González, quien participó con éxito en el Festival de Viña del Mar de 2016, recordó que en el motel presenció las cosas más inimaginables.
“Veía pasar de todo, me pagaban creo que tres lucas la noche....era ordinario”, relató el humorista, quien evocó que oír tanto sexo en vivo le provocaba cosas.
“Yo andaba caliente toda la noche, porque llevaba a las parejas por el pasillo y escuchaba el acto sexual”, dijo desatando las risas de Mauricio Pinilla.
Miedo
Dentro de las miles de anécdotas, el invitado de "Fuera del área" recordó la vez que un cliente salió sin ropa de la pieza, según él con “la bandera a media asta”.
“Como daba para la calle, el loco sale empelota y me dice me estaban mirando en la ventana. Y yo salgo, veo a un loco corriendo y lo empiezo a seguir con el loco a poto pelado...”, relató.
Obviamente, la persona enfurecida reclamó por cómo era posible que lo miraran en su intimidad. “Por seiscientos pesos con dos Alka” que más quería, respondió el humorista.
Más tarde, Rodrigo González detalló que consiguió trabajo en Fantasilandia. “Pasé de andar toda la noche caliente” a andar “cagado de miedo”, se rió.
La gerente, explicó que los inconvenientes y la pérdida de contenido de muchos creadores, se debió al proceso de migración del material que albergaba la plataforma. Existirá compensación.