Continúan los coletazos por los dichos de Francisco Gilabert, quien aseguró recibir presiones externas en el duelo por el descenso entre Huachipato y Copiapó. Esto porque tras una extensa investigación, la ANFP determinó que no hubo ningún tipo de arreglo en el partido disputado en el CAP.
"Me fui con esa sensación de cobrar una hueá que no era. Termina el partido y el VAR me dice ‘hueón menos mal que cobraste el penal, menos mal que nos entendiste’. Puta sí, pero qué hueá pasó. ‘No, me llamaron de Santiago que tenía que cobrar penal’”, expresó el arbitro nacional sobre dicho episodio.
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ANFP niega arreglos
El tema no quedó ahí y desde Quilín indicaron que no hubo ningún tipo de presión extensa ni llamados en medio del partido. Situación que además provocó la salida de Javier Castrilli. Incluso el argentino tras su despido, ofreció su teléfono para ser investigado.
“No existe ni ha existido intervención o presión indebida, abuso de autoridad ni injerencia alguna”, detalla el documento publicado esta jornada.
Además se indica que Genius Sports y Sportradar, empresas de análisis de partidos a quienes se les solicitó informes sobre dicha jornada, descartaron categóricamente cualquier tipo de arreglo.
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