"Le hizo pasar un infierno": repasan a Simone Inzaghi por relegar a Alexis Sánchez
Antonio Cassano, recordado delantero italiano de la década de los 2000, le dio un tremendo espaldarazo al Niño Maravilla.
El delantero fue borrado del Atlético Mineiro, donde Luiz Felipe Scolari lo sentó en la banca.
Eduardo Vargas está lejos de la selección, lejos de ser titular en Brasil, y de momento, lejos de la Universidad de Chile.
El delantero sonó en el mercado veraniego, pero optó por quedarse en el Atlético Mineiro, donde sólo ha jugado 25 minutos en la temporada.
Para peor, el único garante que tenía Vargas en el club abandonó la entidad rumbo a la Confederación Brasileña.
Rodrigo Caetano, director ejecutivo del club, era uno de los que confiaba en el chileno, pero ya no se encuentra en Mineiro, lo que complica más las cosas.
Por eso Vargas está evaluando opciones de salida en caso que no logre encontrar un hueco en el Mineiro.
Pese a que en Azul Azul se ilusionaron a inicios de año, la cosa está muy compleja, debido al tema económico.
El sueldo de Vargas es muy alto para el mercado nacional, gana más de $100 millones mensuales en Brasil, y los azules no pueden competir con eso.
La única opción es que el segundo máximo goleador de la Roja baje sus expectativas con la misión de buscar rodaje, para regresar a los laicos.
Antonio Cassano, recordado delantero italiano de la década de los 2000, le dio un tremendo espaldarazo al Niño Maravilla.
El defensor chileno viajó hasta Uganda y ayudó a la construcción de estadios y escuelas.
Desde Universidad Católica publicaron un enigmático mensaje que podría dar luces del fichaje del Pitbull, quien retornaría así a los pastos de San Carlos.