"No representa una democracia": Acusan a Jeannette Jara de darse una voltereta por su opinión de Cuba
Aunque mantuvo su postura sobre Venezuela, señalando que es una dictadura.
Marco Antonio Solís, el sujeto que tomó como rehén a una trabajadora de una AFP a fines del año pasado, sacó la voz por primera vez de este incidente que movilizó a un gran contingente policial.
A pocas semanas de que se cumpla un año de este hecho, el "secuestrador" finalmente sacó la voz y ofreció su versión de los hechos a "Informe Especial" de TVN.
¿Qué dijo el sujeto?
El testimonio de Solís tiene un tinte bastante escabroso, pues comenta que perpetró este delito "sin dinero, sin pastillas. Sin ver un futuro promisorio y querer alejarme de esta sociedad y del mundo".
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"Yo reventé, colapsé, prácticamente ni medité. Pedía un tiro en la cabeza. Le pedí por favor. Lo pedí a garabatos. Lo pedí llorando. De todas las maneras, se los pedí. Un tiro en la cabeza y se acaba todo", señaló.
Cabe recordar que para ese entonces, Marco Antonio estaba lidiando con el reciente fallecimiento de su esposa, y tomó como rehén a la trabajadora con el objetivo de recibir el millón de pesos de su fallecida cónyuge.
El hombre estaba tan decidido a perder la vida en ese momento, que contó que incluso buscó intentar agredir a un policía, para que ellos ejercieran su derecho a legítima defensa.
"Di un paso y lo amenazo con el cuchillo, para que disparen, pero ni aún así, el tipo (por el carabinero negociador) jamás se acercó la mano a la funda", expresó.
Luego, el secuestrador señaló: "Yo pretendía morirme y no pido a la gente que lo comprenda. Sólo que trate de entender que, en una mente desquiciada, que ya no se siente parte de este mundo, puede pasar cualquier cosa".
Por último, no dudó en pedirle perdón a su familia: "A mis hijos, mi hermana, mi madre, todos. Y juramentarme que voy a tratar de ser la mejor versión de mí de ahora en adelante".
