Y eso que eran testigos protegidos: asesinados de Lampa recibieron seis balazos en la cabeza
El hecho conmocionó al país la madrugada del pasado 5 de junio en el sector de Lo Echevers.
Camila Gómez, la mujer que recorrió a pie 1.300 kilómetros para dirigirse a La Moneda para hablar con el presidente Gabriel Boric, estaría afrontando un delicado momento familiar.
Cabe recordar que la madre de Tomás Ross logró reunir los 3.500 millones de pesos necesarios para un medicamento que ayudaría a su hijo de 5 años en su diagnóstico de Distrofia Muscular de Duchenne.
Pero, la importante hazaña le trajo algunas consecuencias. Así lo contó en conversación con Julio César Rodríguez, en Radio Biobío.
La delicada situación familiar
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"Yo ya no lo puedo dejar más al chiquitito porque ya está enojado conmigo. No me quiere hablar. No sabe por qué desaparecí de su vida y su papá también", contó Gómez, refiriéndose a su hijo menor, Ervin.
"Mi esposo estuvo en esta caminata todos los días, él no caminaba, pero él era del equipo de logística. Entonces también desapareció de su vida de un rato para otro. Así que ahí está enojado con nosotros el chiquitito", agregó la chilota, según consignó La Cuarta.
"No sé cómo voy a poder reparar mi vínculo con él. Espero que cuando esté más grande me entienda", expresó más tarde Camila Gómez a Página 7.
