El diputado independiente, Carlos Bianchi, propuso una reforma constitucional para que los expresidentes dejen de recibir una dieta vitalicia una vez terminado su período, y que en cambio reciban una pensión de vejez desde los 65 años. Esto, principalmente, con el foco puesto sobre el actual mandatario, Gabriel Boric.
En el contexto de la discusión sobre el sistema de pensiones de los chilenos y chilenas que comenzó en el Senado, el parlamentario quiso abrir el debate acerca de la necesidad de reevaluar todas las pensiones, incluida la de los expresidentes de la República.
Para impulsar esta iniciativa, el parlamentario independiente por Magallanes argumentó que "el Presidente de la República actual, Gabriel Boric, en dos años más cumple 40 años y nos parece que es absolutamente necesario trasparentar lo que ocurre una vez que pase a ser expresidente".
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"El anticomunismo visceral de algunos sectores políticos y sus medios afines en nuestro país es demasiado evidente", aseveró el Mandatario.
En esa línea, el diputado alegó que los expresidentes reciben pensiones vitalicias que superan los 16 millones de pesos, monto que se obtiene tras sumar "un piso de 7.2 millones aproximadamente, más traslado, más oficinas".
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"Nos parece impresentable que quien, a los 40 años pase a ser expresidente de la República, cobre de por vida una pensión de más de 16 millones de pesos mensuales", manifestó Carlos Bianchi.
Por último, el diputado explicó que "en cuanto a la situación de los expresidentes Frei, Lagos y Bachelet se eliminaría su dieta vitalicia, pero como todos sobrepasan los 65 años de edad, cumplirían con el requisito de poder solicitar una pensión vitalicia de vejez, con un monto que fijaría la Comisión anteriormente señalada".