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El destacado geógrafo y académico explicó el inusual fenómeno que podría darse.
Personal municipal y de Carabineros trabajaban hace semanas siguiendo a los buses que entraban y salían del lugar.
Fueron varias semanas de investigación, para finalmente descubrir lo que se escondió al interior de un terminal de buses internacional que existía en Estación Central.
Luego de realizar un seguimiento a las máquinas que entraban y salían del lugar, muy cercano a la municipalidad, este martes inspectores de la comuna confirmaron que en el lugar se recibían encomiendas de alimentos y cigarrillos de manera ilegal.
"Estábamos haciendo un seguimiento hace mucho tiempo respecto a este terminal ilegal que está muy cerca de la Municipalidad y que hoy nos damos cuenta que hay mercadería que no tienen cómo acreditar que se ha traído de manera legal y derechamente hay contrabando de cigarrillos", comentó en Canal 13 el alcalde de Estación Central, Felipe Muñoz.
El hecho ocurrieron en la comuna de San Bernardo luego que el agresor perdiera la paciencia con el chofer de la máquina. Pese a la violencia de lo ocurrido no hubo denuncia en Carabineros.
El edil luego agregó que "nos afecta mucho teniendo en cuenta que estos cigarrillos se venden en la vía pública. Estamos requisando estos materiales y finalmente se van a trasladar a nuestras bodegas de aquellas personas que logren acreditar las compras. Nos llama la atención el hecho que estén pasando estos elementos por la Aduana".
Durante la requisición de los productos realizada por Carabineros, llegó hasta el lugar un hombre con la intención de recuperar la mercadería, pero ésta no tenía los papeles exigidos para regularizar la situación.
Cabe mencionar que en Chile una cajetilla de 20 cigarrillos tiene un precio promedio de $5.200, en cambio los de origen argentino son comercializados de manera irregular a poco menos de $3.ooo.
El destacado geógrafo y académico explicó el inusual fenómeno que podría darse.
Claudia Salas contó que el acoso comenzó cuando ella conducía las noticias en dicho canal, donde el hombre la veía en televisión creyendo que ella le enviaba mensajes escondidos por las pantallas.
Según información de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), la anormalidad se debió al desrielo menor de uno de sus coches, específicamente en el vagón de los autos.