"¡Me aburrió la delincuencia!": la rabia de odontóloga mientras asesinaba por error a falso delincuente
Transeúntes advirtieron a la mujer que si insistía con el ataque, terminaría matando al hombre que pedía clemencia.
Hans Pozo Vergara, un joven de 20 años, fue el desafortunado protagonista de uno de los casos más macabros que nuestro país por morir descuartizado.
Esta historia comenzó el 27 de marzo del año 2006, cuando en el barrio Marta Brunet de Bajos de Mena, Puente Alto, un perro halló uno de los pies de la víctima.
Jocelyn Díaz, una joven de la misma comuna, tomó su teléfono en la noche del 27 de marzo del 2006 para llamar a la central del diario Las Últimas Noticias.
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Macabras
Lo primero que escuchó el reportero encargado del turno nocturno al poner el teléfono en su oreja lo marcaría de por vida: "Tengo una foto que les puede interesar. Un perro anda con un pie humano en el hocico".
"Al fondo de Quitalmahue, en el paradero 47 de Santa Rosa". Luego de obtener las coordenadas, el periodista salió tembloroso, pero raudo, con rumbo al lugar indicado a eso de las 12 de la noche.
Raúl Inzunza, un reconocido fotógrafo policial de la época, llegó junto al reportero al sitio. Las imágenes prometidas por Jocelyn eran macabras, y causarían un gran revuelo.
Un pie con un corte seco justo donde termina el tobillo y en buen estado era la impactante foto, que en ese tiempo se ofrecía al mejor postor. Así comenzaba la historia policial que marcó la década del 2000.
Pan de cada día
Hoy en día asesinatos de este tipo, en donde el desmembramiento forma parte del método, se volvieron pan de cada día.
La semana pasada una mujer fue asesinada y descuartizada en la región del Biobío. La dejaron en la vía pública. El 28 de mayo de este año, un hombre de 24 años fue despedazado en pleno centro de la capital.
El 17 de abril, también de este calendarii, un joven asesinó y desmembró a su padrastro y dejó sus restos abandonados en un carro y una maleta cerca de unos blocks.
El 16 de enero, en Punta Arenas, un cuerpo fue encontrado con los miembros separados del torso al interior de una casa. También en Talca se encontró un cuerpo descuartizado poco después de año nuevo.
¿A qué se debe esta horrorosa práctica? ¿Cuál es el real motivo que lleva a un ser humano a desmembrar y ocultar las partes de otra persona?
Los motivos
El patólogo forense Klaus Püschel, junto a su compañero, Erwin Koops, definió en 1987 los motivos principales que inducen a una persona al descuartizamiento.
Hay motivos defensivos (ocultar el cuerpo), agresivos (el asesinato se produce en un estado de ira y es seguido de la mutilación del cuerpo) y ofensivos (se quiere cometer la mayor ofensa sobre la víctima).
Sue Black, antropóloga forense, hablaba de ello en su libro Escrito en los huesos: "Desmembrar un cuerpo supone denigrarlo, insultarlo", detalla.
