CERRAR
Empresas como Norte Verde se encargan de recuperar una serie de metales que normalmente son desechados, con el fin de exportarlos para que obtengan una nueva vida útil en Europa, Asia y América del Norte.
El reciclaje es una actividad cada vez más importante y necesaria en el mundo. No solo contribuye a cuidar el medioambiente, sino que también genera beneficios económicos y sociales para las personas y las comunidades.
Entre los materiales que se pueden reciclar, los metales ocupan un lugar destacado por su valor y demanda. Sin embargo, también son objeto de robos y receptaciones que afectan al patrimonio público y privado, afectando la seguridad y la calidad de vida de las personas.
Por eso, el reciclaje de metales se ha transformado en el último tiempo en una actividad clave, con distintos actores que apuntan a trabajar de forma responsable y sustentable. Uno de ellos es Norte Verde SpA, una recuperadora de metales que opera en Chile desde 2012.
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“Contamos con un efectivo modelo de prevención de delitos, el cual nos permite identificar la procedencia de cada uno de los metales desechados que adquirimos. De esta forma, evitamos que delitos como el robo o receptación de metales tengan lugar en nuestra empresa”, comenta Alejandro Sáiz Blanco, director ejecutivo.
Norte Verde Reciclaje es una empresa chilena que se dedica principalmente al reciclaje de metales no ferrosos, como cobre, bronce, aluminio y acero, desde el año 2012. Desde entonces, ha operado desde la región de Coquimbo hasta O'Higgins, contando con más de 120 trabajadores directos e indirectos y con una cartera de más de 400 proveedores.
“Nuestro modelo se basa en la adquisición de metales desechados a nuestra red de recicladores, para luego trasladarlos a nuestra planta y separarlos por tipo. Tras ello, se compactan y se exportan a América del Norte, Europa, y Asia”, cuenta Alejandro Sáiz.
La empresa tiene un compromiso con el medioambiente y la responsabilidad social, entendiendo que el reciclaje de residuos metálicos en Chile contribuye a la generación de empleo y a la reducción de contaminantes. Según la Cámara Chilena del Reciclaje, la industria del reciclaje de metales genera alrededor de 5.000 empleos directos y 15.000 indirectos, y permite evitar la emisión de 7,8 millones de toneladas de CO2 al año.
La compañía opera con un modelo de prevención de delitos que se basa en el cumplimiento de la Ley N° 20.393 sobre la responsabilidad penal de las personas jurídicas por la comisión de ciertos delitos en su interés o provecho.
Este modelo tiene como objetivo evitar que las personas naturales vinculadas a la empresa, como dueños, controladores, responsables, ejecutivos, representantes o quienes realizan actividades de administración y supervisión, cometan delitos como lavado de activos, cohecho o soborno a funcionario público, nacional e internacional, receptación, negociación incompatible, corrupción entre privados, entre otros.
El modelo de prevención de delitos de Norte Verde se compone de distintos aspectos, partiendo por un encargado de prevención, que es la persona responsable de diseñar, implementar y supervisar el modelo.
Existe también un sistema de identificación y evaluación de riesgos, que consiste en analizar los procesos y actividades de la empresa que puedan facilitar o propiciar la comisión de los delitos. Al mismo tiempo, un sistema de medidas y procedimientos para prevenir los riesgos, que consiste en establecer normas, controles y protocolos para evitar o mitigar la ocurrencia de los delitos.
También se establece un sistema de supervisión y monitoreo, que consiste en verificar el cumplimiento y la eficacia del modelo, así como detectar y corregir eventuales desviaciones o incumplimientos. En esa línea, un sistema de reporte e investigación, que consiste en establecer canales para recibir y gestionar denuncias internas o externas sobre posibles situaciones irregulares o ilícitas relacionadas con los delitos.
Cuenta al mismo tiempo con un sistema de sanciones, que consiste en aplicar medidas disciplinarias o correctivas a quienes infrinjan el modelo o cometan alguno de los delito y un sistema de difusión y capacitación, que consiste en informar y educar a todos los integrantes y colaboradores de la empresa sobre el modelo y los delitos.
De esta manera, se logra prevenir el delito de receptación, entre otros, y fomentar el reciclaje seguro y responsable.
Existe también una iniciativa con municipios para promover la prevención del delito de receptación y el reciclaje inclusivo. De momento, el programa de reciclaje inclusivo de Peñalolén, es el primero de varios proyectos en los que Norte Verde planea brindar apoyo en materias de logística al momento de reciclar metales.
Este programa en particular, se encarga de brindar apoyo técnico, logístico y financiero a los recicladores de base de la comuna. El objetivo es dignificar y profesionalizar su labor, mejorando sus condiciones de trabajo e ingresos, y al mismo tiempo contribuir al cuidado del medio ambiente y a la reducción de los residuos que van a los rellenos sanitarios.
La compañía se encarga de retirar los materiales reciclados desde los puntos limpios que la municipalidad asigna a los recicladores de base, sin costo para ellos, y les paga un precio justo y conveniente por sus productos. De esta forma, se facilita el proceso de venta y transporte de los materiales reciclados.
“Estamos muy contentos con esta iniciativa, porque creemos que es una forma concreta de aportar al desarrollo social y ambiental del país. Queremos seguir colaborando con más comunas que quieran implementar programas similares, y así contribuir a generar una cultura del reciclaje en Chile”, afirmó Alejandro Sáiz.
