Estas semanas hemos visto cómo muchas familias siguen hasta la fecha encontrándose sin luz, lo que se ha tornado muy complejo, ya que existe cada vez menos la capacidad de jugar en los adultos. Estamos tan inmersos en la vida cotidiana, con incrementos frecuentes en el costo de la vida y la casi utópica conciliación familia-trabajo, que no jugamos con nuestros bebés y niños y niñas, e incluso para calmarlos cuando están ansiosos/as les pasamos nuestro celular con internet.
Es ideal que el día del niño/a se transforme en un momento para compartir con ellos y ellas en familia, independiente sea la configuración de nuestra familia: biparental (ambos padres juntos), monoparental (madre o padre solo/a), ensamblada o reconstituida ("los tuyos, los míos y los nuestros"). De esta manera, esta celebración no puede transformarse en la fiesta del consumo y menos aún en un estrés para las madres, padres y cuidadores principales por sobreendeudamiento.
Ojalá la forma de celebrar la puedan tomar conjuntamente con los hijos e hijos, independiente de la edad de éstos y que sientan que su voz fue escuchada por los niños y niñas. Dada la vorágine que vivimos, los niños y niñas lo que más necesitan son "tiempos de calidad", en los cuales, por ejemplo: tomemos desayuno juntos sin celular todos y todas (adultos incluidos), conversemos temas relevantes y además podamos pasarla bien en conjunto.
En este contexto, les propongo una serie de actividades de puede hacer con sus niño/as para celebrar este día, sin que se trasforme en un ver la Tablet o Internet todo el día.
- "Armar con ello/as la agenda del día previamente": Si bien la agenda no tiene por qué ser rígida, puede incluir actividades desde el desayuno a la cena.
- Salir a algún parque a jugar lo que a sus hijo/as les gusta, lo que implica conocer los juegos preferidos de sus hijas e hijos y, además, ojalá pueda jugar algo que a usted como adulto le guste jugar. Si lo hace forzadamente, se notará su no disfrute, y puede generarse entonces un efecto no deseado (de mayor lejanía emocional). El compartir al aire libre, un picnic, por ejemplo, y juegos entre medios, son excelentes espacios para conectarse con la naturaleza y en familia. No olvide que dibujar o pintar también incentiva la creatividad.
- Si tiene más de un hijo/a pueden organizar el día de tal forma que hagan actividades que incluyan acciones para cada uno. Si tiene apoyo del otro progenitor o de algún familiar de la red extensa (tío, primo, etc.), pueden dividirse actividades en algún momento del día. Esto es favorable, ya que enseñamos que hay tiempos para compartir todas y todas y tiempos para hacer lo que más le gusta a uno u otro.
- Si su hijo/a es muy sociable puede hacer pijamadas o invitar a su amigo/as a dormir. También puede hacer actividades con los padres de los mejores amigos/as de sus hijos, ya que esto permitirá crear redes de apoyo, las que son fundamentales para el desarrollo psicológico del niño o niña.
- Puede también incorporar momentos de tecnología, ideal que éstos sean viendo una película juntos o jugar juegos de mesa, que cada vez existen más y ¡pueden prestarse!
- Finalmente cocinar juntos es una excelente alterativa, si es realizada como juego y no como la obligación diaria y clásica.
Finalmente, recalcar que lo que más recodarnos de la infancia son las "experiencias", no los juguetes ni las cosas materiales, que se van, se pierden y no llenan vacíos emocionales.
¡Por una infancia y adolescencia más saludable!