Este jueves terminó siendo una jornada sumamente importante para la iglesia católica, con la elección del cardenal Robert Prevost como el nuevo Papa.
Bajo el nombre de León XIV, el prefecto del Dicasterio para los Obispos obtuvo la mayoría de los votos necesarios en el Cónclave para asumir como el sucesor de Pedro.
Casi dos horas después de que saliera el humo blanco en la Ciudad del Vaticano, el nacido en Chicago realizó su primer discurso como el nuevo líder de la iglesia católica.
Ya cerca del final, el religioso sorprendió con una alocución en un perfecto español: "Un saludo a todos aquellos y en modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú".
"Donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo", cerró.
En 1985, Robert Prevost fue enviado como misionero a Perú, donde asumió múltiples funciones pastorales y formativas, entre ellas la dirección del seminario agustiniano en Trujillo y la docencia en Derecho Canónico en el seminario diocesano.
Debido a esto, pudo obtener la nacionalidad peruana, obteniendo una fluidez en español y profundo entendimiento de la realidad latinoamericana.