El escándalo de una pareja que tuvo sexo en el teleférico de Guayaquil continúa al rojo, porque los enamorados pasaron de culpables a víctimas.
Aunque el encuentro íntimo sucedió el pasado 24 de junio, el hecho siguió en la polémica después que se viralizó el registro de sexo en vivo.
Aunque muchos condenaron a los novios otros atacaron a Aerovía de Guayaquil, empresa desde donde se filtró el registro que circuló por todos lados.
Cámaras de seguridad
El registro causó amplio debate en la sociedad ecuatoriana, porque la pareja decidió tener relaciones sexuales en el transporte público y durante el recorrido.
De hecho, a los amantes les advirtieron por los parlantes que era necesario mantener la compostura aunque estuvieran a metros de altura.
"Señores usuarios de la cabina 117, les recuerdo que están siendo monitoreados por las cámaras de seguridad, en la siguiente estación serán desembarcados por personal de seguridad", dijo un funcionario por los altavoces.
Víctimas
Después que el video se viralizó, la mujer captada por las cámaras pidió clemencia porque su vida privada se destruyó.
"Les pido de todo corazón a las personas que aún siguen compartiendo el vídeo que ya no lo hagan. No traten de dañar la imagen de una mujer. Hoy me paso a mí, pero mañana puede ser a uno de sus familiares", rogó.
El fiscal César Peña, que tomó el caso, anunció que la preja podría emprender acciones legales por violación de intimidad.
"Son víctimas, en tal caso podrían ser objeto de una sanción administrativa como anularles la tarjeta de pasaje o bloquearlos determinado tiempo por situaciones inmorales, pero eso solo es administrativo, no hay acciones penales en su contra, el que metió la pata es quien publicó un vídeo", expresó a Extra.
La empresa que administra el teléferico tomó una medida radical y despidió al funcionario que filtró el video.