"Con tono burlesco... me sentí humillado": tratan de mechero a ganador de Rojo y no le piden ni disculpas
Juan Ángel Mallorca dio un terrible testimonio de cómo lo trataron en un supermercado.
Gissella Gallardo fue consultada recientemente en "Hay que Decirlo" por las declaraciones que realizó su pareja Mauricio Pinilla, en el "Sin Editar" de Pamela Díaz.
Con la "Fiera", el exfutbolista se sinceró respecto de su etapa de adicciones, de cómo dejó de lado a sus hijos, y cómo contempló la idea de quitarse la vida.
Este período, sumado al fallecimiento de su padre, calaron sumamente hondo en la panelista del programa de Canal 13, quien debió tomar una radical decisión.
"Mis niños lo estaban pasando mal", partió relatando la opinóloga, agregando que "porque aparte estaba enfermo mi papá, su papá había desaparecido".
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"Como cuenta él, no tenía ganas de verlos... se vino todo junto", puntualizó, lo que le hizo llevar a sus pequeños al psiquiatra.
Fue en ese contexto, que el doctor le señaló tajantemente que Mauricio Pinilla no estaba en condiciones de estar en contacto con sus hijos, algo que golpeó a Gissella.
"Yo mandé a la punta del cerro a este psiquiatra. Le dije, 'no entiendo cómo puedes estar planteando esto, si él es el papá y uno es incondicional, y ¿cómo los niños no van a ver a su papá?'", cuestionó.
En ese sentido, el médico le indicó que "podía ser un riesgo para él, para los niños, para todos. Él estaba con una depresión muy grande, entonces yo estaba así cómo, ‘¿qué hago?".
"Después murió mi papá, y después tuve que hacerme cargo del tratamiento de Mauricio. Ha sido todo bastante fuerte", recordó Gissella Gallardo.
Finalmente, dio un paso fundamental para recuperar a su familia: "Me pagué el tratamiento para las crisis de pánico y crisis de ansiedad y depresión".
