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Britney Spears volvió a ser noticia luego de verse involucrada en un episodio durante un vuelo privado que la trasladaba desde Cabo San Lucas, México, hacia Los Ángeles.
Diversas fuentes informaron que la artista, de 43 años, no respetó las reglas a bordo del avión, lo que motivó una advertencia directa por parte de las autoridades una vez que aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX).
Spears estuvo bebiendo alcohol durante el trayecto y, en cierto momento, encendió un cigarro, acción que contraviene las normativas federales de aviación. Ante esta situación, los tripulantes del vuelo se inquietaron y le solicitaron que apagara el cigarrillo, lo cual hizo.
Pese a ello, las autoridades fueron alertadas mientras aún estaban en el aire, y aguardaban su llegada en tierra. De acuerdo con algunas fuentes la policía le hizo una advertencia verbal por su comportamiento, tras lo cual quedó en libertad. "No es la primera vez que recibe una advertencia. No se caracteriza precisamente por seguir las normas", comentó una fuente a Revista People
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JSX, la empresa encargada del vuelo, optó por no emitir declaraciones, y el portavoz de Spears tampoco respondió a los requerimientos de la prensa.
Tras el episodio, la cantante se refirió al incidente a través de su cuenta de Instagram, donde compartió un video brindando desde el avión. En la publicación escribió: "¡Yo ayer!!!", y relató que pensó que los agentes que la esperaban estaban allí para brindarle apoyo: "Pensé ‘¡Oh, me siento especial!’".
Sobre el cigarrillo, explicó: "En algunos aviones donde he estado no se puede fumar, pero este era distinto porque los portavasos estaban en el exterior del asiento". Agregó que fue "la primera vez que tomaba vodka" en un vuelo y que eso le hizo sentir "¡muy inteligente!".
Spears reconoció haber pedido un cigarro, que un amigo le encendió, y que por ello asumió que fumar estaba permitido. No obstante, se disculpó "con cualquiera a quien haya podido ofender".
La intérprete también expresó su incomodidad por la actitud de una de las asistentes del vuelo, a quien acusó de no dejarla levantarse durante los primeros 20 minutos y de ser tosca al colocarle el cinturón de seguridad. "Fue muy extraña. No me agradó cómo me colocó el cinturón y ¡también invadió mi espacio!", escribió. Además, aseguró que la azafata intentó "humillarla" y por ello la reportó ante la policía. "Creo que no le caí bien desde el momento en que subí al avión", sostuvo.
En diciembre pasado, Spears ya había manifestado su intención de mudarse a México por el constante acoso de los paparazzi. Aunque encontró mayor tranquilidad en las playas mexicanas, fuentes cercanas aseguraron que no se trataba de una decisión definitiva.
Ese mismo mes, la cantante fue vista en un jet privado durante su cumpleaños portando un encendedor de butano, un artículo inflamable prohibido en vuelos, lo que quedó registrado como un antecedente en su historial de imprudencias aéreas.
Desde que en noviembre de 2021 finalizó la tutela legal que la mantuvo bajo control judicial durante 13 años por problemas de salud mental, Spears ha estado intentando retomar el control de su vida y su carrera. En su autobiografía The Woman in Me, publicada tras esa etapa, escribió: "Cuando salí de la tutela, por fin fui libre de contar mi historia sin estar sometida a la presión de quienes manejaban mi vida".
