"Este joven se me acerca...": Denisse Malebrán "enamoró" a integrante de los Backstreet Boys
La vocalista de Saiko coincidió con la banda norteamericana en Los Ángeles, Estados Unidos a comienzos de los 2000.
El consumo de alcohol y otras sustancias no tenían al vocalista de Guns N’ Roses, Axl Rose, en el mejor de sus estados. De hecho, durante los últimos años ha recibido críticas constantes respecto a su aspecto físico y notorio sobrepeso. Sin embargo, al cumplir 63 años, el ícono del rock sorprendió a sus seguidores con un notable cambio.
Durante su juventud el cantante fue considerado como uno de los hombres más atractivos del mundo. Pero la vida de excesos y fiesta le pasó la cuenta y su apariencia se deterioro bastante. Eso, hasta ahora, porque el intérprete de "November rain" estaría pasando por su mejor momento de los últimos años, y así se le ha podido ver en sus últimas apariciones públicas.
Datos que no sabías de Axl Rose
Su verdadero apellido no es Rose
Síguenos en: 
Aunque adoptó el apellido Rose en su juventud, su nombre original era William Bruce Bailey. El cambio se debió a la complicada relación con su padrastro, Stephen Bailey, quien lo crió como si fuera su hijo biológico. Más tarde, al descubrir que su padre biológico se llamaba William Rose, decidió recuperar el apellido.
Fue detenido más de 20 veces antes de ser famoso
Durante su adolescencia en Indiana, Axl tuvo varios problemas con la ley. Fue arrestado en múltiples ocasiones por peleas, vandalismo y disturbios menores. Incluso, pasó varias noches en la cárcel antes de mudarse a Los Ángeles y dedicarse de lleno a la música.
Su obsesión con los relojes
Pocos saben que Axl Rose es un coleccionista apasionado de relojes de lujo. Entre sus favoritos están los de la marca Audemars Piguet, y ha sido visto usando modelos exclusivos de Richard Mille y Patek Philippe.
Su extraña costumbre antes de los shows
Axl es conocido por sus largos retrasos en los conciertos, pero también por una curiosa tradición: antes de salir al escenario, solía pedir que le sirvieran una taza de té caliente con miel y sentarse en silencio durante varios minutos, concentrándose para la presentación.
