ENTREVISTA | "Chascas" Valenzuela habla sobre su nueva serie: "Escribí 10 versiones del capítulo piloto"

José Ignacio Valenzuela, más conocido como el "Chascas", nuevamente revolucionó Netflix con el estreno de su más reciente trabajo, "Las Hermanas Guerra".

Buscando reeditar el éxito de sus series anteriores como "Quién mató a Sara?" o "Donde hubo fuego", el guionista chileno se volcó a desarrollar una trama que promete quedarse con la atención de cualquiera que la vea.

Componentes clásicos de la época dorada del cine mexicano, protagonismo femenino, y toneladas de melodrama son los componentes de una serie que hace una semana de su estreno se posiciona con tremendas cifras.

En conversación con La Hora, el "Chascas" nos entrega más detalles de esta serie ambientada en México, y habla sobre el desafío de reinventarse en el éxito.

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- Cuéntanos un poco de tu nueva serie "Las Hermanas Guerra"

- Es un melodrama moderno, es un melodrama con toques de acción, un melodrama además femenino, en el sentido de que todos los grandes personajes son mujeres. Está situada en México, particularmente en la zona de Durango, en el desierto mexicano, y cuenta la historia de dos hermanas, Perla y Antonia, que tienen unas deudas muy graves que saltar, y que se embarcan las dos en un viaje de venganza en donde va a llegar un momento donde no vamos a tener muy claro quién es la víctima y quién es el victimario.

Además, todo esto contado de una manera muy trepidante, muy vertiginosa, con giros muy inesperados y con un final súper explosivo.

- Muy al estilo de tus series anteriores...

- Absolutamente. Es un estilo que me gusta desarrollar, que vengo cultivando hace un tiempo, en donde esta rapidez y esta urgencia de la historia me permite tocar temas que a lo mejor tocados de una manera más seria o con más tiempo podría generar algún tipo de rechazo en la audiencia. Pero desde el momento que se cuentan de una manera trepidante, urgente y siempre la historia está avanzando, eso hace también que la audiencia de alguna manera soporte mejor esos temas.

- ¿Cómo evalúas la repercusión de la serie a una semana de su estreno?

-  Hoy desperté con la noticia de que estamos número uno en 21 países. Es tremendo. Estar en número uno en 21 países es una cosa impresionante. Y estamos en el top ten, o sea, a veces en el lugar dos, en el lugar tres, en el lugar cuatro, en el top ten de 65 países. La mitad del mundo está viendo 'Las Hermanas Guerra'. Y son millones de espectadores los que está teniendo alrededor del planeta.

Sobre los mensajes, obviamente no soy capaz de poder leerlos todos. Pero en general, lo que más se repite o el comentario más común entre todos los espectadores es eso, que es una serie inesperada, que es una serie adictiva, que es difícil de dejar de ver, porque además los capítulos son cortitos, duran media hora.

- Hablando de estas tremendas cifras, ¿cómo puedes reinventarte en el éxito siendo guionista?

- El éxito no te garantiza nada, no te garantiza trabajo. No garantiza que porque te fue súper bien te van a llamar para una segunda. Y que el éxito dura lo mismo, o sea, dura hasta que aparece un fracaso. Por lo tanto, tampoco hay que tomárselo muy en serio. Mi vida no cambia para nada, porque aunque la serie esté teniendo un éxito rotundo alrededor del mundo, me tengo que seguir levantando igual a las seis y media de la mañana para llevar a mi hija al colegio y hacerle desayuno.

Lo único que sí me genera es un estrés personal, porque a mí no me gusta repetirme. Si analizas las últimas cuatro series que he hecho, no se parecen en nada. Y eso es lo que a mí de alguna manera me condiciona el éxito.

- ¿Y en qué te inspiraste para esta nueva serie?

- Yo soy súper amante del melodrama, y se me nota. En general en mis teleseries, en las series, siempre tengo elementos melodramáticos, porque yo siento que el melodrama, que es el único género además que hemos inventado los latinoamericanos, es un género muy noble, es un género que genera muy fácilmente adicción.

Y para eso, me puse a ver un montón de películas del cine de oro mexicano de los años 50, que es la época clave del melodrama latinoamericano. En los años 50, 60 en México, sobre todo ese cine en blanco y negro con María Félix, que era puro melodrama. Y empecé desde ahí a trabajar esta idea de dos hermanas, que siempre me han gustado las relaciones familiares a mí, me encantan. Pero también salió la idea de hacerla en el mundo rural, cosa que también es algo muy distinto a lo que yo hago siempre.

- ¿Qué fue lo mejor de escribir 'Las Hermanas Guerra'?

- Lo mejor fue para mí haber podido encontrar el equilibrio perfecto entre ese homenaje al melodrama de los años 50, pero que no se sintiera anticuado. Y me costó mucho, me costó diez versiones. O sea, en el capítulo uno, escribí diez versiones de ese piloto, porque en algunos casos sentía que me quedaba anticuado, después sentía que me quedaba demasiado metralleta, demasiado videoclip. Me costó un mundo encontrar el tono que rescatara ese melodrama que yo tenía en mente tan fuerte, pero que por otro lado se sintiera moderno, que la gente lo viera y sintiera que estaba viendo una serie, una serie moderna de Netflix, y no un producto viejo con otra forma de contarse.

- ¿Puedes invitar a nuestros lectores a ver tu nueva serie?

- Quiero invitar a todas esas personas a las que les gusta empezar a ver una serie y sentir que no pueden parar, a que le echen un ojo a estas hermanas. Es la clásica historia en la que son las dos de la mañana, estamos muertos de sueño, y nos debatimos entre ver un capítulo más o dormir, y decidimos ver un capítulo más. Esta es la serie para hacer ese tipo de maratón, así que los invito a dejarse encantar, sobre todo por este elenco súper poderoso de mujeres, y una historia que yo les prometo, no van a tener cómo predecirla, ni cómo anticiparse a ella, porque los giros son muchos y muy variados, y los va a tener así como en ascuas hasta literalmente la última escena del último capítulo.