El ex esposo de Marlen Olivari alega que se siente un ciudadano de segunda clase dando la pelea de David contra Goliat.
Roberto Dueñas enfrentó hoy la audiencia de formalización por amenazas en contra del juez de la Corte de Apelaciones de La Serena, Juan Espinosa Rojas.
La acción judicial incluye amenazas en contra del adolescente de iniciales D.C.E.T, quien es el hijo menor de edad del magistrado en cuestión.
La imputación dice que el comunicador incitó "por el medio de comunicación social, actos de hostilidad o futura agresión" contra el adolescente.
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Frente a estos hechos el Ministerio Público formalizó al ex esposo de Marlen Olivari por ATENTADOS CONTRA LA AUTORIDAD, ART. 261 N° 1 Y 264 del Código Penal ( respecto de la víctima Juan Carlos Espinosa Rojas) y un delito de AMENAZAS NO CONDICIONALES, ART. 296 Nro 3 del Código Penal (respecto de la víctima DCET) la participación que se imputa en estos hechos, es de autor, en grado consumado.
Tras enfrentar la audiencia Roberto Dueñas habló en el matinal "Buen día" de Mi Radio desde New Orleans, Estados Unidos, desde donde enfrentó a la justicia.
"Me formalizan cargos desde el estallido social. En noviembre de 2019 hice unos comentarios, nunca amenacé, por la decisión que tomó un juez", explicó.
"Como es costumbre mía me salí de madre y en el marco de lo sucedido, pero no amanece a nadie ni al juez ni a su familia", agregó el empresario.
Sin embargo, Dueñas replicó que "los ciudadanos tenemos derecho a criticar las decisiones de los jueces" y sobre todo cuando él también recibió amenazas.
El ex marido de Marlen Olivari recordó que durante el estallido social "fui a la PDI con una carpeta de más de 20 amenazas de muerte en mi contra con nombre y apellido y números de teléfonos".
"Hasta el día de hoy nadie de la fiscalía me llama. Hasta en los muros de la ciudad aparecía mi teléfono y amenazas de muerte", insistió.
"Mantuve silencio, pero me llama la atención el show armado por fiscalía que mandó un comunicado avisando para verme llegar ahí. Les quiero decir que aún estoy esperando. Que la fiscalía actúe en contra de casos reales, de gente que ha sufrido robos", añadió.
"Me siento un ciudadano de segunda categoría, yo recibí reales amenazas de muerte. Como hombrecito que soy voy a enfrentar todo, porque no amenacé a nadie", concluyó.
