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La ganadora de Gran Hermano aseguró que está disponible a luchar por el cetro al que ya postulan todos los artistas y jurado del Festival.
El estado de catástrofe en la región de Ñuble, ha marcado la pauta por la gravedad de los incendios que afectan el lugar. Por lo mismo, es que diversos medios se han desplegado a sus departamentos de prensa, como por ejemplo Mega, quienes mandaron a Gonzalo Ramírez.
Fue mientras estaba despachando desde de Tomé que Gonzalo Patricio Ramírez Troncoso vivió un momento bastante especial, ya que mientras estaba al aire, apareció un cachorro que estaba desorientado culpa de la situación.
"¿Sabes qué? Hay un perrito chiquito que está abandonado acá en este sitio”, comenzó diciendo el periodista al que el pequeño perro le movió el corazón por lo desvalido que estaba.
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En brazos
En vez de seguir con su despacho, comenzó a silbarle para que se acercara, "pobrecito" dijo el hombre en terreno, acompañado por un "venga, venga", para llamar la atención del perrito.
Fue así que tras caminar entre medio de unos leños el cachorrito se le acercó moviendo su cola y cabeza gacha, claramente con miedo, pues se acercaba un poco y se alejaba.
Finalmente cuando ya se dio con Gonzalo Ramírez, lo tomó en brazos y se lo entregó a una de las vecinas del lugar quien lo sostuvo momentáneamente, y otra persona que pasaba por el lugar aprovechó de darle agua con una botella.
Dándose cuenta que nadie llegó a reclamarlo, el rostro de Mega expresó, “lo vamos a dejar en el auto nuestro”, todo esto mientras el fuego seguía avanzando.
Gonzalo Ramírez no dejó de trabajar durante el día, pues tras los despachos que hizo para el "Mucho Gusto" en la mañana, siguió en la cobertura especial de la señal privada, donde se mudó hacia Santa Juana.
Mientras estaba en el contacto en vivo se le pudo ver saliendo de la calle luego de darse cuenta que un grupo de vacas se le venían acercado, pero no solo fue eso, pues también un gran grupo de autos.
Todo ellos estaban arrancando del incendio, pero los problemas comenzaron cuando varios autos pensando que ya estaban fuera de peligro, se estacionaron en berma, lo que causó la furia de Ramírez. "¡muévanse de ahí, carajo!, no se pueden estacionar acá".
