CERRAR
Desde el año 2019, el registro de marcas ha tenido un incremento de un 56%, lo que para el Instituto Nacional de Propiedad Industrial - INAPI, este trámite "ha pasado a tener mayor importancia para los emprendedores chilenos".
La pandemia del Covid-19 generó diversos cambios en la vida diaria. Inclusive también permitió que varios se aventuraran en nuevos emprendimientos con el desafío de surgir con proyectos propios.
Pero antes de iniciar con este "sueño", primero se debe tener en cuenta el aspecto legal. Lo que conlleva registrar una marca comercial en Chile. Para ello se indica que una solicitud es ejecutable en tiempos normales.
Aunque expertos indican que es fundamental conocer primero bien el escenario que se va a enfrentar uno. "Es primordial informarse debidamente, para que este trámite que puede durar, aproximadamente 6 meses no se extienda a 2 años” expresó José Andrés Urrea, CEO de Pravik Legal.
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1. Sólo una vez que tu marca se encuentra registrada, posees el derecho exclusivo y excluyente de utilizarla en Chile.
Es muy importante que sepas que sólo una marca registrada te otorga el derecho exclusivo de utilizarla. "Si empiezas a funcionar con una marca no registrada, te arriesgas a que quien si la registre te exija que la dejes de usar, previo pago de
cuantiosas indemnizaciones", agregó el experto.
2. Las marcas no están "disponibles".
No basta con buscar una marca exacta en una plataforma de consulta en línea, esperando que ésta esté “disponible”, ya que toda solicitud de registro de marca debe pasar por un proceso de revisión que incluye análisis de forma y fondo, pudiendo caer en una Causal de Irregistrabilidad que impida el registro de la marca. Es decir, una marca puede no haber logrado ser registrada nunca, por diversos motivos, y no por eso estar disponible.
3. Ojo con las Causales de Irregistrabilidad.
La ley de Propiedad Industrial enumera una serie de motivos por los cuales no se puede permitir el registro a una marca. Lo más importantes y frecuentes, son: que la marca sea idéntica a otra marca ya registrada; que la marca sea muy parecida a
otra marca ya registrada; que la marca esté compuesta por palabras descriptivas del producto o servicio que se ofrece; entre otras.
4. Haz un Estudio de Factibilidad antes de iniciar el proceso.
Algunos asesores lo ofrecen gratis, lo importante es que en ese informe aparezca la revisión detallada de la marca contrastada con cada causal de irregistrabilidad legal, se informen los riesgos del proceso, y se haga una recomendación concreta.
Si bien un Estudio de Factibilidad no puede prever si alguien efectuará Oposición al proceso, si puede prever las Causales de Irregistrabilidad más obvias que le afectan a la marca, y de esta forma buscar evitar riesgos.
5. Solicita tu marca con un logotipo y busca que sea creativa.
La distintividad es el concepto clave en un proceso de registro de marca, en este sentido la creatividad es fundamental, ya que la marca debe ser totalmente nueva sin referencias explícitas a ninguna otra. En este sentido un logotipo con figuras y colores novedosos y llamativos, siempre será un aporte de Distintividad, que ayudará también a diferenciarte de otras marcas que pudieran estimarse similares.
