CERRAR
El exjugador del Arsenal y el Tottenham fue condenado por crueldad infantil después de infligir 17 lesiones y dejar con daños cerebrales a la menor de dos años.
Este miércoles 22 de agosto, un ex futbolista inglés fue declarado culpable por crueldad infantil y de provocar lesiones corporales y cerebrales graves en enero de 2020 a la hija de su pareja de ese entonces, quien tenía tan solo dos años de edad.
Se trata de Kiernan Hughes-Mason, entrenador y ex futbolista de 32 años de la English Football League Championship (EFL), quien además fue parte de los equipos juveniles del Arsenal y el Tottenham.
El lamentable hecho ocurrió en enero de 2020 cuando el ex futbolista profesional se encontraba cuidando a la menor y llamó al teléfono de emergencias para pedir una ambulancia para la hija de dos años de su expareja.
Ante la llegada de los paramédicos al lugar, Hughes-Mason les explicó que se encontraba en el primer piso de la vivienda cuando escuchó un gran golpe en el piso de arriba y que al llegar, supuestamente se había encontrado con la niña que "se había caído de una casa de muñecas".
Sin embargo, para el personal de salud no concordaba el relato del es jugador con los hechos. Tras examinar a la pequeña, los médicos descubrieron 17 lesiones diferentes a lo largo de su cuerpo, por lo que tuvieron que someterla a un coma inducido.
Síguenos en: 
Dos semanas después del trágico hecho, la policía mediante una investigación halló mensajes telefónicos enviados por Hughes-Mason en los que decía "realmente me está poniendo de los nervios" y "voy a golpearla", por lo que el ex futbolista fue arrestado.
Durante el juicio, los doctores mencionaron que los daños que sufrió la pequeña se pueden comparar con los de víctimas de un accidente en un auto a gran velocidad o como una caída desde varios pisos.
Tras la condenda, la familia de la menor emitió un comunicado en el que dice: "Finalmente tenemos un veredicto y ese hombre ahora es responsable de lo que le hizo a nuestra pequeña niña. Hemos tenido que pasar por lo que ninguna familia debería tener que pasar jamás, y nuestra niña va a soportar las consecuencias de lo que le ha hecho durante el resto de su vida".
Kiernan Hughes-Mason ya cuenta con una una sentencia y se dará a conocer el 10 de septiembre del presente año por el Tribunal de la Corona de Basildon.
