Una polémica asomó este jueves en los Juegos Olímpicos de París 2024, especialmente en la disciplina del boxeo femenino, debido a la presencia de una atleta con altos niveles de testosterona.
El combate en cuestión enfrentó a la italiana Angela Carini y la argelina Imane Khelif, quien ya había fallado las pruebas de género y había sido excluida del mundial de la disciplina el año pasado.
La pelea solo se extendió por 50 segundos, durante los cuales la africana propinó un duro golpe a la europea. Eventualmente, Angela Carini se dirigió hacia su esquina y le pidió a su entrenador retirarse.
Cuando el juez del encuentro finalizó el encuentro, dando por ganadora a Khelif, la napolitana no aguantó y comenzó a llorar, evidentemente afectaba. Ni siquiera le dio la mano a su contrincante.
"Estoy destrozada. Fui al ring para honrar a mi padre. Me dijeron muchas veces que era una guerrera, pero preferí parar por mi salud. Nunca había sentido un puñetazo como este", declaró a los medios tras su participación.
En las horas previas al combate, ya se hablaba de este enfrentamiento y de la supuesta desigualdad de condiciones, tomando en cuenta que Imane Khelif posee altos niveles de testosterona en el cuerpo.
Sin ir más allá, la argelina había sido excluida del mundial de la categoría el año recién pasado tras no pasar la prueba de género, pero el Comité Olímpico Internacional le habría concedido permiso para competir en París 2024.