Javier Altamirano celebrando un gol la fecha pasada. | instagram @javialtamirano7
El volante chileno parece evolucionar bien tras su trombosis, y seguirá su recuperación en una sala común del Instituto Fleni.
Javier Altamirano ha tenido una buena evolución tras sufrir una trombosis en pleno partido de Estudiantes de la Plata vs. Boca Juniors, episodio que le produjo convulsiones y que generó preocupación en Argentina y Chile.
Fue la jornada del lunes, casi 24 horas después de su descompensación en cancha, que desde su club informaron que "la convulsión sufrida por el jugador fue una trombosis del seno longitudinal superior (cerebro)".
Estuvo varios días internado en el Instituto Médico Platense, bajo observación en cuidados intensivos, para luego ser trasladado al Instituto Fleni.
Finalmente, Estudiantes de la Plata informó este sábado por la mañana que Altamirano "continúa con su buena evolución. En el día de hoy pasará de cuidados intensivos a sala común para continuar con su recuperación".
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Tras ser trasladado a su nueva habitación, el exHuachipato comenzó a recibir visitas de sus compañeros, entre ellos, el defensa argentino Zaid Romero, uno de sus más cercanos en el plantel del "Pincha".
El zaguero sorprendió posteando en su cuenta de Instagram una historia en la que aparece posando junto a "Javi", evidenciando una notable mejoría en su estado de salud.
"Feliz de verte sonreír que es lo que te identifica, amigo. Te quiero mucho", expresó el trasandino en sus redes sociales.
Javier Altamirano junto a Zaid Romero - Captura de pantalla
Soy una periodista que terminó cubriendo deportes después de probar en muchas áreas. Me gustó, así que aquí estoy, atenta a la actualidad y el humo relacionado
La egresada del INAF mostró la cartulina roja a la gran figura de los albos, luego de ser advertida por uno de sus asistentes. Ella no ve la jugada, reclamó el DT del Cacique, Jorge Almirón.
Esta cita contará con panoramas gratuitos como noche de cine y música en vivo, además de la competencia de psicobloc, donde los deportistas enfrentarán el desafío de escalar, sin cuerdas, un muro de 15 metros de altura con caída directa al agua.