"Le hizo pasar un infierno": repasan a Simone Inzaghi por relegar a Alexis Sánchez
Antonio Cassano, recordado delantero italiano de la década de los 2000, le dio un tremendo espaldarazo al Niño Maravilla.
"Mi relación con él fue durante el tiempo que convivimos fue casi de padre a hijo. Eran mi mamá, mi papá y don Orlando. A ese nivel. Es súper doloroso", dice Fernando Astengo.
El defensor central vivió una relación especial con Orlando Aravena, técnico nacional fallecido durante la mañana de hoy.
Aravena era el técnico de la selección cuando ocurrió el Maracanazo en Brasil, lo que prácticamente acabó con su carrera.
Astengo recordó en conversación con La Tercera que "seguimos siendo amigos fuera del fútbol. Y luego la distancia, los hijos, otras preocupaciones pesan mucho. Siempre pensaba en él, tengo fotos suyas en mi casa, que cada cierto tiempo las miraba".
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Asimismo indicó que "lo conocía al revés y al derecho. Me contó cosas que no le contó a nadie. Lo mismo yo. Le pedía consejos. Fueron claves para mi carrera y para mi vida".
Además, no dudo en culpar a Roberto Rojas de que Aravena pasara al olvido del fútbol nacional.
"Pagó una situación que no debiera haber pagado nunca. Eso marcó su carrera. Era el técnico de la Selección", dijo el zaguero.
Más duro, Astengo recalcó: "Pudo haber dirigido afuera. Había jugado una final con Palestino frente a Colo Colo, fuimos subcampeones de América, tuvimos una selección competitiva que la truncó un sicópata".
Pero más allá de la polémica se quiso quedar con lo bueno. "Tuve la gran posibilidad de toparme con una persona extraordinaria. Solo tengo palabras de agradecimiento, de cariño. Ahora estaba pensando, porque sabía que ya no podría conversar con él, qué decirle, si podría entrar a verlo"
