Fue en 2020 cuando Nicolás Castillo, uno de los delanteros con más proyección en el fútbol chileno, sufrió una trombosis que casi le cuesta la vida, luego de una operación al tendón del recto femoral.
En ese entonces el "Nico" pertenecía al América de México donde nunca más jugó. Tras un largo proceso de recuperación, el ariete intentó retornar a su nivel en el Juventude de Brasil y luego en el Necaxa el 2022. Ambos intentos fueron fallidos.
Tras una larga para de casi dos años, Universidad Católica, el club que lo vio nacer, decidió abrirle las puertas, y este jueves Castillo fue anunciado como flamante refuerzo para el equipo comandado por Nicolás Núñez.
"Los más importantes en mi vuelta... chucha... Yo creo que mi abuelo, es en el que siempre pienso en este momento. Mi familia... La gente que estuvo en ese momento más feo de mi vida. Ellos son los que me empujaron a esto. Voy a estar agradecido siempre", dijo el mundialista sub 20 de Turquía.
Nicolás Castillo no pudo con la emoción
Visiblemente emocionado, agregó que "fue un momento difícil de mi vida, luchando por mi vida. Ellos siempre estuvieron ahí, donde estuviera. Siempre pienso en la gente que me empujó a seguir intentándolo".
Pero el Nico no pudo más y rompió en llanto luego de agregar que "si tuviera que nombrar a una persona, ese es mi hijo. No me vio jugar nunca. Vivió los momentos más difíciles y siempre estuvo ahí. Cuando no tenía ganas estuvo conmigo tirándome para arriba. Por él, por mis papás que sufrieron mucho".