Cola de mono: ¿un gusto navideño inofensivo o una bomba para el cuerpo?
Su combinación de alcohol, azúcar y cafeína puede tener efectos en el cuerpo si se bebe sin medida, especialmente al momento de enfrentar la temida caña.
Aunque en gran parte del mundo es conocido como Santa Claus o Papá Noel, en Chile el personaje más esperado de la Navidad tiene un nombre propio.
Apenas parte diciembre, su imagen aparece en vitrinas, comerciales y hogares chilenos: barba blanca, traje rojo y una sonrisa bonachona. Sin embargo, a diferencia de otros países, en Chile pocos niños le escriben cartas a Santa Claus. Aquí, el protagonista indiscutido de la Nochebuena es el Viejito Pascuero, una denominación tan familiar como identitaria.
El origen del término se remonta a comienzos del siglo XX, cuando la figura de Santa Claus, inspirada en San Nicolás y popularizada por la cultura estadounidense, comenzó a llegar a Chile a través de revistas, publicidad y, más tarde, el cine. En ese proceso de adopción cultural, el personaje necesitaba un nombre que conectara mejor con el lenguaje local.
"Viejito" surge como una forma cariñosa y cercana de referirse a un adulto mayor, lejos de cualquier tono peyorativo.
"Pascuero", en tanto, proviene de la palabra Pascua, término que en Chile históricamente se ha usado para referirse a la Navidad, como en "Pascua de Navidad". La combinación dio origen a un nombre simple, fácil de recordar y profundamente cercano.
Dos fenómenos surgidos de internet y plataformas de streaming se convirtieron en furor.
Si bien el nombre ya circulaba de forma informal, fue la publicidad la que terminó por consolidarlo. Grandes campañas comerciales de mediados del siglo XX, especialmente en el retail, comenzaron a usar de manera sistemática el concepto de "Viejito Pascuero", reforzando su presencia en el imaginario colectivo.
A diferencia de otros países latinoamericanos, donde conviven términos como Papá Noel o Santa Claus, en Chile la denominación local terminó imponiéndose casi por completo, transformándose en una marca cultural en sí misma.
Hoy, el Viejito Pascuero no es solo una versión chilena de Santa Claus, sino un personaje propio, cargado de afecto y tradición. Su nombre refleja una forma local de vivir la Navidad: más cercana, familiar y, por qué no decirlo, bien chilena.
Así, mientras en el hemisferio norte esperan a Santa, en Chile los niños se van a dormir esperando al Viejito Pascuero, ese visitante nocturno que, más allá de su nombre, sigue cumpliendo el mismo objetivo de siempre: hacer que la Navidad tenga un poco de magia.
Su combinación de alcohol, azúcar y cafeína puede tener efectos en el cuerpo si se bebe sin medida, especialmente al momento de enfrentar la temida caña.
Los antisociales amenazaron e intimidaron a todos los presentes con un arma de fuego para así poder concretar su acto ilícito.
Aunque en gran parte del mundo es conocido como Santa Claus o Papá Noel, en Chile el personaje más esperado de la Navidad tiene un nombre propio.