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Los trabajadores anunciaron una "ralentización indefinida" la que partirá a las 8 de la mañana de este 15 de noviembre.
Tras largas horas de negociaciones, los funcionarios de la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC), confirmaron que este viernes a las 8 de la mañana comenzará una movilización de "ralentización indefinida" en los distintos aeropuertos del país.
Si bien los vuelos ni actividades de los trabajadores no serán suspendidas, el funcionamiento de los terminales aéreos serán más lentos, lo que se traducirá en una mayor congestión de pasajeros, a quienes se les recomienda tomar las consideraciones del caso.
La decisión de los trabajadores ocurre luego que no se llegar a un acuerdo por el pago de un bono universal permanente, asegurando que la propuesta presentada por el Gobierno es insuficiente.
"El llamado a la autoridad es a detener las movilizaciones y negociar una solución realista que permita su sostenibilidad en el tiempo", comentaron desde los sindicatos.
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Desde el Aeropuerto Nuevo Pudahuel informaron que la movilización de operadores de vuelo y controladores aéreos podría afectar a 4.000 personas en vuelos nacionales y 2.000 en internacionales, quienes tendrán importantes retrasos de abordaje el que podría llegar a tres horas.
