La innovación tecnológica llega a los pagos online

Los métodos de pago han cambiado radicalmente en los últimos años. La irrupción de las nuevas tecnologías ha permitido la aparición de nuevas formas de pago que suman inmediatez y comodidad a las tradicionales. A nivel nacional, en Chile los monederos digitales representaron el 18% de los pagos en el 2023, siendo el método de pago más utilizado por detrás de las tarjetas de crédito y débido, que sumaron el 59%. Ya en el 2021, los pagos en línea comenzaron a ganar terreno, aumentando más del doble en comparación con el 2020. Por supuesto, la situación ha sido posible gracias a la expansión del acceso a internet por parte de la población chilena. A inicios de este año, Chile contaba con un total de 30,16 millones de conexiones móviles, lo que equivale al 53,5% de la población total.

Esto, como es natural, ha provocado una disminución del uso de dinero en efectivo en toda la nación, al igual que ha ocurrido en la mayoría de países del mundo. Por otra parte, la normalización de los métodos de pago online ha alterado los hábitos de compra de los ciudadanos, impulsando el comercio electrónico. Así lo reflejan las cifras para el 2023, año en el que el comercio electrónico creció un 16% en Chile, alcanzando los 34.100 millones de dólares. Como consecuencia, el marco regulatorio del país se está adaptando al panorama actual, apoyando al desarrollo fintech para que la innovación siga creciendo sin perjuicio de la seguridad de los consumidores chilenos.

Como se comentaba anteriormente, los monederos digitales son uno de los métodos de pago más utilizados en Chile. Dentro de todos los que hay disponibles, el que cuenta con mayor popularidad en la población chilena es MercadoPago, herramienta que permite desde su interfaz el pago con tarjetas de crédito o débito, transferencias bancarias, financiar compras o enviar dinero a otros usuarios, entre otras muchas más funciones. Para el 2023, MercadoPago contaba con 45 millones de clientes por trimestre en Latinoamérica, alcanzando los 170.000 millones en transacciones al año. Junto a Brasil, México y Argentina, Chile es uno de los países con mayor uso de este monedero digital. En el 2023, MercadoPago contaba con 2,6 millones de clientes chilenos. Estas cifras son de esperar, teniendo en cuenta que MercadoPago, al igual que el resto de monederos digitales, ofrece características muy valoradas por la población, como la accesibilidad o la facilidad de acceso.

En esta misma línea, cabe destacar el papel que está teniendo la Cuenta Rut en los hábitos de compra de Chile. Con más de 14 millones de clientes, esta plataforma ofrecida por BancoEstado se ha expandido enormemente en los últimos años, además de ser el método por excelencia del Gobierno chileno a la hora de emitir los beneficios sociales y bonos estipulados por la ley. El hecho de que cualquier persona con un RUT pueda acceder a esta cuenta bancaria, así como la posibilidad de abrir una cuenta sin necesidad de un saldo mínimo hacen de la Cuenta Rut una opción muy popular en el país, tanto a la hora de pagar en negocios físicos como en línea. Esto se puede observar especialmente en aquellas industrias del mercado en las que las transacciones económicas son una parte fundamental del negocio, lo que hace que este tipo de plataformas ganen todavía más importancia. Sectores como los cursos en línea, los ecommerce o las plataformas de juego online están favoreciendo a este auge de métodos de pago en línea, entre los que destaca Cuenta Rut gracias a las facilidades que ofrece. Este método de pago está siendo ampliamente utilizado en plataformas como casinos online, ya que como se puede ver en https://www.casinotopsonline.com/es/casinos-cuentarut/, hay cada vez más plataformas aceptando esta modalidad de pago.

Lo mismo ocurre con las criptomonedas, una alternativa que, aunque todavía no alcance la notoriedad de las anteriores, está ganando protagonismo en el mercado. Criptomonedas como Bitcoin o Etherum permiten a los usuarios contar con una alternativa descentralizada en sus transacciones, reduciendo costos asociados y eliminando la necesidad de intermediarios.

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Poniendo la vista en el futuro, es de esperar que la innovación tecnológica no ponga el freno en lo que respecta a los pagos online, surgiendo nuevas formas que se sumen a las ya existentes. Así, con el paso de los años, las transacciones continuarán ganando en rapidez, seguridad y accesibilidad, tanto en Chile como en el resto del mundo. En definitiva, la transformación de los métodos de pago en el país tan solo es un reflejo de una tendencia a nivel global hacia la digitalización del sector financiero. Según la tecnología siga su curso, lo más probable es que sigamos viendo cambios en el modo en el que realizamos nuestras transacciones. De momento, a nivel estatal parece que se están tomando las medidas necesarias para impulsar dicha transformación.