Agosto. Ese es el mes en que la "Ley Karin" entrará en vigencia, normativa que establece que los empleadores deberán implementar una serie de acciones para prevenir, investigar y sancionar el acoso laboral, sexual y la violencia en el trabajo.
Entre las medidas a adoptar están la definición de protocolos de prevención que acompañarán nuevos procesos en materia de investigación y sanción.
De acuerdo con datos de la Achs, entre 2022 y 2023 hubo un aumento del 29,5% en casos de violencia calificadas como enfermedad profesional de salud mental, siendo la "hostilidad de la jefatura" el principal agente de riesgo. E
n cuanto a casos de violencia calificadas como accidente laboral o de trayecto, hubo un aumento del 36,4%; de ellos, el 86% de las agresiones o acoso sexual a causa o con ocasión del trabajo, el 62% de la violencia, agresión o amenaza ejercidas por personas ajenas a la organización y el 99% de la violencia entre colaboradores de una misma empresa son accidente de trabajo (los porcentajes restantes son calificados como accidentes de trayecto).
Paulina Calfucoy, gerenta de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de la Achs, explica que "la entrada en vigor de esta ley plantea un desafío importante de adaptación y cambio cultural en el mundo del trabajo que debe ser abordado con un enfoque preventivo".
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"El objetivo final es lograr prevenir el acoso y violencia laboral para así impactar positivamente sobre la salud mental y física de las personas", indica.
La ejecutiva explica que "nosotros hemos puesto a disposición contenido detallado y herramientas concretas para facilitar estos procesos, con un protocolo tipo, capacitaciones, guías para la definición de políticas, los cuales están disponibles en nuestra página y a través de nuestros asesores".
Además, Calfucoy menciona que la Achs lanzó la campaña "Aquí puro buen trato", que busca prevenir situaciones de violencia en el ambiente laboral, establecer directrices claras sobre el comportamiento adecuado, y entregar material que sea un recordatorio constante de las conductas que deben regir en el lugar de trabajo.
Para ello, propone una serie de iniciativas que apuntan a sensibilizar y apoyar a las organizaciones a entender como prevenir el acoso laboral y la violencia en el trabajo para generar mejores ambientes laborales.
Paulina Calfucoy menciona tres aspectos claves que deben ser abordados con entrada en vigencia de la ley:
1. Definir una política que establezca un compromiso genuino al más alto nivel y que ofrezca claridad conceptual sobre los comportamientos que no son aceptables dentro de la organización.
2. Establecer y dar a conocer a todos quienes son parte de las organizaciones los procedimientos y canales de denuncia, resguardando criterios de imparcialidad, privacidad e integrando perspectiva de género en los procesos de investigación.
3. Gestionar el cambio, formando a los líderes, capacitando a las personas, sensibilizando sobre el valor de avanzar organizacionalmente hacia un ambiente laboral libre de acoso y violencia que permita a todos ganar conciencia sobre sus propios comportamientos.
"Las organizaciones privadas e instituciones públicas necesitan responder al desafío de la puesta en marcha de la Ley Karin, que significa un cambio de paradigma respecto a cómo se conciben las relaciones en el trabajo, y busca generar espacios libres de violencia y acoso, donde se respete la dignidad de las personas y se incluya la perspectiva de género", manifiesta.
"Por eso, con nuestra campaña Buen Trato queremos que se tome como propia la siguiente premisa: No subimos el tono. Nada sexual: miradas, comentarios, gestos. Ni pelambres, ni burlas, ni ofensas. Ni siquiera en broma", concluye Calfucoy.
Para conocer más de la campaña y acceder a material preventivo ingresa a https://www.achs.cl/buentrato