"Estamos al borde del holocausto": Heraldo Muñoz sembró el terror por ataque de Israel a Irán
El polítologo y diplomático sostuvo que esta situación va a llevar a algún tipo de contra retaliación por parte de Irán.
La pena más gravosa que contempla nuestra legislación fue pedida en contra de Carlos González Gaete, de 75 años, inculpado por el crimen de su esposa, Ana María Guerra (66), ocurrido en diciembre del 2020.
La fiscalía solicitó la cadena perpetua calificada en contra del acusado, que se encuentra confeso de haber asesinado con un hacha a su mujer en diciembre del 2020.
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De acuerdo a las pruebas que maneja el Ministerio Público, el femicidio Carlos González Gaete lo cometió con el hacha, elemento con que le propinó varios golpes en la cabeza a la víctima hasta que le quitó la vida en su casa, ubicada en avenida Michaihue.
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Agravantes
La Fiscalía solicita la pena máxima en base a "dos agravantes especiales que estableció la última modificación de la ley relacionada con femicidios: edad de la víctima, adulta mayor, y la circunstancia de que existía un historial -sin condenas penales- de agresiones, violencia previa", detalló el fiscal de Delitos Violentos de Concepción, Andrés Barahona.
Más encima, la víctima había colocado dos denuncias por agresiones, una en 2007 y la segunda en octubre de ese año, sólo dos meses antes de ser brutalmente ultimada.
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Tribunal le pasó teléfono
Esa información resulta clave, ya que el Ministerio Público alertó que la gran mayoría de las víctimas de femicidio acuden a los organismos pertinentes a denunciar, pero no son oídas.
En este caso, como la mujer había denunciado las agresiones en el hogar, la justicia determinó que se le pasase una teléfono celular para requerir ayuda. Sin embargo, el día del crimen Carabineros no alcanzó a llegar antes que el asesino le quitara la vida.
