Luego del milagroso rescate los cuatro niños indígenas perdidos en la jungla, el drama de Colombia es encontrar a Wilson, el perro rescatista que ayudó en la búsqueda.
Poco a poco se saben detalles de la proeza de los menores, que pasaron 40 días en la selva del Guaviare, tras el accidente de avioneta del 1 de mayo.
Sin duda, una historia de película, pero que no tiene aún un final feliz porque el ejército no encuentra a su can héroe y se teme que sucedió lo peor.
Guaviare
La angustia crece a cada momento ya que Wilson pasó a convertirse en un héroe nacional en Colombia, pero los indígenas de la selva del Guaviare creen que ya es un mártir.
Aunque el comandante de operaciones especiales, Pedro Sánchez, aseguró que la Operación Esperanza no termina hasta que encuentren a Wilson, se teme lo peor.
Todo, porque Jesús Dagua, miembro de la Guardia Indígena del Cauca, dijo que el animal quedó en la peligrosa jungla como ofrenda.
Canje
"Fue intercambiado. Quedó como ofrenda por los espíritus que tenían a los niños", explicó Dagua, quien cree que ya no hay nada que hacer.
El especie de gurú espiritual señaló que están rogándole a la selva que dé un último acto de misericordia y devuelva a Wilson, a quien lo buscan sin cesar.
"Esperemos que mediante conversa espiritual logre salir, ya los pueblos amazónicos están en eso porque es una vida de todas maneras", agregó el chamán.
"Creemos que, si se sigue haciendo esa comunicación, el perrito Wilson saldrá, pero fue ese canje, digamos espiritual, para que los niños aparecieran ", explicó.
Perro belga
Wilson es un perro belga de la 'Camada W' de las Fuerzas Militares, que lo adiestraron durante 14 meses en la Escuela de Ingenieros Militares.
Sus instructores lo capacitaron para detectar explosivos o drogas y le enseñaron a hacer rescates bajo edificios colapsados o rastrear personas en misiones humanitarias.