Nuevas y masivas protestas hay en Estados Unidos, luego que la policía de Akron (Ohio) reconociera este domingo que el joven afroamericano de 25 años Jayland Walker estaba desarmado cuando ocho agentes le dispararon al menos 60 veces, provocándole la muerte.
Stephen Mylett, jefe de policía de Akron, citó el informe de un médico forense para admitir la masacre sobre el joven, que fue abatido durante una persecución.
La policía también liberó las imágenes de la cámara corporal de la policía. El registro, eso sí, deja más preguntas que certezas sobre el tiroteo contra un hombre afroamericano desarmado, que por ahora está siendo investigado por la Oficina de Investigaciones Criminales de Ohio (BCI por sus siglas en inglés).
El portavoz de la policía agregó que Walker se llevó la mano a la cintura durante la persecución con los agentes. Y como se giró ligeramente hacia los efectivos, estos abrieran fuego contra él, según recoge el diario local Akron Beacon Journal.
Policías con licencia
Los ocho policías que estuvieron “directamente involucrados en el tiroteo”, dijo el portavoz Mylett, salieron con licencia administrativa.
Esta medida se tomó al mismo tiempo que se corrobora la cantidad de veces que le dispararon a Walker “Sin embargo, según el video, anticipo que ese número será alto”, dijo. “Se dispararon muchas balas“, agregó el funcionario.
Familia llama a la paz
Robert Dejournett, pariente de Walker y pastor de la Iglesia de Dios del Templo de St. Ashworth In Christ en Akron, le dijo a CNN que la familia quiere que Walker sea recordado como un joven amante de la diversión que estaba lleno de vida.
“Somos gente temerosa de Dios, que cree en Dios y queremos ejemplificar eso incluso en este proceso”, dijo Dejournett. “No queremos disturbios ni nada por el estilo“.
Dejournett dijo que la familia espera que el tiroteo conduzca a un cambio sistemático.
“Queremos ser tratados como seres humanos, ya sabes, hombres negros, hombres jóvenes, tienen miedo cuando se trata de la Policía, eso no debería ser así”, dijo.