Durante varios años el brasileño formó parte del grupo de baile junto a su fallecido hermano Jeferson Barbosa. Ambos dejaron la agrupación en 2014.
Corría el año 2000 Axé Bahía era uno de los fenómenos juveniles del momento, es que sus integrantes se habían ganado el cariño del público. Fue así como Jociney Barbosa se hizo conocido en el país, y durante años estuvo radicado en Chile, lugar que se transformó en su hogar.
Sin embargo, el 2014 todo cambió, la relación entre los integrantes de Axé Bahía se quebró por completo, y Jociney junto a su hermano Jeferson decidieron dejar la agrupación. “Desde ahí que ya no éramos parte del grupo, no porque lo quisiéramos”, expresó el brasileño a Página 7.
“Tuvimos que empezar de cero... después cuando comenzamos con nuestras presentaciones mi hermano y yo, ellos dijeron que no trabajarían con nosotros porque éramos irresponsables. Se hablaron muchas cosas...”, relató Jociney Barbosa.
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Lamentablemente, la vida le tenía un difícil momento, perdió a su hermano Jeferson quién se suicidó en Chile. Dos años después de ese terrible hecho Jociney decidió dejar el país y empezar una nueva vida.
El brasileño llegó a Boston, Massachusetts, ciudad estadounidense donde está radicado desde marzo de 2020.
“Vine por una invitación de un primo que está en El Bronx y que es profesor de capoeira. También era una buena oportunidad para conocer el lugar”, comentó el ex Axé Bahía.
“Llegué y a las dos semanas comenzó esto de la pandemia. Mis amigos en Chile estaban todos desempleados, una locura, entonces no podía regresar”, añadió.
Finalmente, ahora Jociney se dedica a realizar clases en el Centro Cultural Verónica Robles, donde rescatan cada una de las tradiciones de Latinoamérica.
"De hecho, todos los lunes un grupo de chilenos enseña cueca a la gente. Está México con los bailes aztecas, Cuba con la salsa, también la cultura de Colombia, Perú”, contó.
En el lugar, Jociney imparte clases a niños y adultos de capoeira, un arte marcial afro-brasileño que combina facetas de danza, música, acrobacias y expresión corporal.
“Me metí como instructor de capoeira en el centro cultural, que ya tiene varios años. Quizás a futuro sale algo de baile", contó Barbosa.
