Terremoto en Chilevision: Paramount lo pone a la venta y rostros tiemblan
En las últimas horas se conoció que el canal local tendrá nuevos dueños y que ya no pertenecerá al conglomerado estadounidense.
Este martes, Katty Kowaleczko, María Jimena Pereyra, “Tita” Ureta, Begoña Basauri, “Pepi” Velasco, “Chiqui” Aguayo, Rayén Araya, Yazmín Vásquez y el animador Sergio Lagos recibieron en “Juego textual” a la animadora Kathy Salosny.
En la primera sección de la noche, “Campo minado”, Begoña le preguntó a Kathy sobre sus dos mediáticas salidas de matinales: en 2011 del “Buenos días a todos” y en 2017 del “Mucho gusto”. Al respecto, la presentadora reconoció que su salida del matinal de Mega fue la más dolorosa de las dos.
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“Son salidas distintas, al ‘Buenos días a todos’ llegué básicamente a hacer un reemplazo. Yo tuve siempre la sensación de que no iba a ser de larga duración. En cambio, el ‘Mucho gusto’ es un programa que fuimos construyendo juntos con Lucho Jara y que se convirtió en un fenómeno. Fue muy triste cómo me fueron sacando de ahí. Eso afecta la confianza, la autoestima, y no quedó otra que retirarse”, respondió Salosny.
Consultada por los motivos de esa gradual salida del espacio matutino, la animadora sostuvo que es un problema sistemático que las mujeres tienen en el negocio televisivo. “La televisión es muy cruel con las mujeres. Las mujeres en televisión tenemos una fecha de caducidad, porque vamos cumpliendo años, nos van saliendo canas o nos vamos poniendo un poco más gordas. Creo que en mi caso fue un tema de edad. Además, no tenía una buena relación con el productor ejecutivo. Ese último tiempo fue todo muy doloroso. Es triste cuando haces todos los intentos por llevarte bien con una persona y no resulta”, indicó.
Adicionalmente, dijo que su forma de vivir y de pensar empezó a ser un problema a la hora de relacionarse con la jefatura del programa. “Me sentí cuestionada porque no soy casada, porque no tengo hijos, porque soy feminista y digo las cosas que pienso y cómo las pienso. Me decían por interno: ‘Ella, la feminista’. Se te respeta menos cuando no tienes hijos”, opinó.
Su relación con el "Halcón"
A la hora de hablar de su relación con Felipe Camiroaga, Kathy contó cómo lo conoció cuando era asistente de dirección en Chilevisión. “Yo veía un chico con suspensores y engominado (...) Le dije a la Sole (productora) ‘Traigamos a este hombre acá’. Yo no lo conocía”, reveló Kathy, agregando que “tuvimos sinergia desde el primer día, nos potenciábamos. Lo pasamos increíble en esa época”.
Según narró, tuvieron una complicidad muy poderosa, primero como amigos, luego como pareja. “El primer beso fue en un auto. Yo tenía 19 o 20 años. Además que él me había echado el ojo. Él me dedicó una canción de Juan Luis Guerra. Siempre me decía que yo era su versión en mujer y él mi versión en hombre”, dijo.
Eso sí, fue una relación complicada desde siempre. “Él era un desastre como pareja. Lo pasábamos el descueve porque era un tipo muy lúdico, demasiado entretenido, muy inteligente, sensible, profundo. Pero era un loquillo”, admitió, sosteniendo que ella estuvo enamorada de él, y él también le dijo que lo estaba de ella.
“Tuvimos un romance y luego una amistad muy profunda, de salidas y entradas. Teníamos nuestras diferencias de pronto y nos separábamos por largos períodos, pero siempre volvíamos. Fue un vínculo indisoluble a pesar de todo lo que pasamos”, rememoró.
En torno a la trágica muerte de Felipe, Kathy recordó que para ese momento ambos estaban distanciados debido a su despido del matinal de TVN y a las pifias que Felipe recibió en la entrega del Copihue de Oro. “Nosotros estábamos en un momento complejo, estábamos separados, porque había una farándula muy dura que hizo mucho daño, y el episodio del Caupolicán fue muy dramático”, recordó.
Sin embargo, tuvieron la oportunidad de reencontrarse, por casualidad, pocas semanas antes del accidente del Casa 212. “Yo hacía rato que no lo veía. Nos miramos a los ojos. Hola, chica, me dice. Me dijo que volvió a construir su casa, y me dijo ‘Qué bonito tu pañuelo’. ‘Este pañuelo me lo regalaste tú’, le dije. ‘Lo sé’, me dijo. Nos separamos de beso, nos dimos la espalda y nos fuimos. Yo dije: ‘Esto es un nuevo principio’. En esos pocos minutos me encontré con su mirada, sentí que esa amistad iba a seguir”, confesó.
La política y la maternidad
En la sección titulada “Seamos Claro”, Sergio le preguntó a Kathy Salosny si le han ofrecido un cargo político. “Sí, me han tentado harto, varias veces, desde alcaldías hasta el Senado”, confesó, y agregó que, aunque se ha tentado, no lo haría ahora.
“Para entrar en política hoy hay que ser súper responsable y hay malos vicios que observo y no me gustan. Yo quisiera una nueva Constitución primero. A mí me dio mucha pena lo que pasó con el proceso Constituyente. ¿Qué significó el estallido, que tanta gente quedara ciega, toda la destrucción y la violencia de lado a lado? Todo se fue al tacho. Yo quedé un poquito sin ganas. Una especie de hastío. Me encanta la política, ejercer un rol social, me importa lo que pasa con mi país”, argumentó.
La siguiente sección del programa, “Cara a cara”, estuvo a cargo de Begoña. En ella Kathy Salosny confesó, entre otras cosas, que cree en los duendes, que ha experimentado con drogas, que tuvo romances por zoom durante la pandemia, que el sexo está sobrevalorado, que no cree en Dios, que prefiere Algarrobo por sobre Santiago y que Patricia Rivadeneira es su mejor compañera de actuación.
En torno a su vida personal, le preguntaron a Kathy Salosny si alguna vez ha sentido atracción por otra mujer. “Una vez con una mujer en una playa tuvimos una conexión y algo me pasó”, reveló Katherine. “Ella me hizo una invitación, yo estaba en República Dominicana con un amigo. Ella era de Brasil, se fue acercando y acercando, y me pareció súper atractiva. Me invitó a Brasil a su casa. Aunque no di el paso, tuve el impulso de conocerla más. A lo mejor habríamos sido grandes amigas”, explicó.
Consultada sobre la maternidad, Kathy confesó que una vez en los años 90 quiso adoptar un hijo. “Investigué, quise hacer todo el proceso, sobre todo con la intención de sacar del círculo de la pobreza a algún niño. Pero era tan burocrático el proceso. Yo era la última de la lista, había una prioridad de las parejas heterosexuales, después de los extranjeros, y al final los hombres o mujeres solas. En estos momentos ya no es un anhelo, ya fue, no tendría el tiempo”, indicó.
