El camino al éxito de Pedro Aravena
Una historia de esfuerzo, perseverancia y pasión
Como muchos emprendedores, Juan Pablo Vargas el año 2019 se vio sin trabajo, por lo que buscando como poder subsistir llegó al mundo del reparto de agua purificada, emprendimiento que se ha transformado en parte de su vida.
Es así como de a poco creó "Aguas Purificadas Misha". "Junté un poco de dinero que tenia guardado y decidí emprender", aseguró de entrada Vargas.
El camino para poder establecerse ha sido complejo, según cuenta Juan Pablo. "Fue poco dinero de inversión, recuerdo que el primer mes abre vendido unos 5 bidones de agua, ha costado mucho, luego realice mas publicidad en redes sociales, en ese momento pude captar mas clientes, entre ellos Maicao, Hotel Cabo de Hornos, Pre-unic y empresas mas pequeñas, pero nuestro fuerte ha sido las personas naturales", aseguró.
¿Qué ha sido lo mas lindo y lo mas difícil de emprender?
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Lo mas lindo es que me he encontrado con personas que son mis clientes habituales, que siempre te dan un buen concejo y una palabra de aliento si estas con ganas de tirar la toalla.
Lo mas difícil es poder realizar todas las tareas, ya que aparte de mi emprendimiento trabajo. Soy supervisor de crédito y cobranza en una empresa de tecnología, entonces debo programarme para realizar entregas o comprar lo que me falta para el mes. El tiempo es lo que mas me falta para poder realizar todas estas tareas.
¿Por qué este emprendimiento y no otro?
Porque vi que en mi comuna no habían tantas personas vendiendo agua purificada a domicilio. Ahora se masificó un poco, pero nosotros contamos con un valor agregado en nuestro emprendimiento, que es un mejor servicio. Ya sea mostrando con hechos que nuestra agua esta certificada y es de buena calidad. Siempre he querido poder tener una planta de agua purificadora, lamentablemente por temas de dinero no se ha podido pero ese es mi suelo, y por eso es que me gusta este emprendimiento.
¿Qué consejo le darías a los que aun no se atreven a emprender?
¡Que lo hagan!, que todo al comienzo empieza muy difícil, hay momentos que tienes tirar la toalla por que cuesta mucho, pero todo lo difícil es bien recompensado. Luego dirás me costo sangre sudor y lagrimas, pero lo logré y te sentirás tranquilo que gracias a todo tu esfuerzo tienes algo tuyo, que te costo, y eso se valora mucho.
