En 1988 Colo Colo reabrió definitivamente las puertas del Estadio Monumental, y el mismo año, Chile tomaba una de las decisiones más importantes de su historia en el plebiscito del 5 de octubre.
Por lo mismo, el General Augusto Pinochet, buscaba por todos los medios ganar en popularidad, para que el pueblo dijera "Sí" a su gobierno.
Así fue como el dictador intentó utilizar a Colo Colo para conseguir el respaldo del pueblo albo, ofreciendo una importante suma de dinero a la dirigencia del Cacique para que finalizara con las obras del estadio Monumental.
Bastó apenas esta intención, para que se levantara el mito que la casa de los albos era "el estadio de Pinochet".
Detalles de la historia
¿Qué tan real fue la historia? El presidente de Colo Colo a fines de los años '90, relató en Radio Pauta, lo ocurrido cara a cara con el general en 1988. "Cuando estaba toda esta efervescencia de que íbamos a terminar el estadio y que habíamos invitado a Joao Havelange, nos llaman de La Moneda para fijar una reunión con Pinochet, vamos con Eduardo Menichetti y ahí nos plantea que a él le gustaría cooperar con Colo Colo para la terminación del estadio", dijo en conversación con Fernando Agustín Tapia.
Luego agregó que "todo esto en 1988 muy cerca del plebiscito, entonces era un juego político y yo asumí que si el Gobierno ponía un peso, iba a convertirse en el estadio hecho por el Gobierno, entonces yo le contesté: 'sabe, no necesitamos nada, el estadio ya está financiado'. Y me dice '¿Pero cómo?' Yo le insisto que está financiado y me repite que quiere colaborar, entonces yo le digo si quiere colaborar, hagamos algo para los socios, un lugar donde puedan vacacionar que muchas veces no tienen".
300 millones
Pero según Dragicevic la historia no terminaría con un acuerdo. "Me pregunta cuánto, a mí me pilla de sorpresa, no sabía que decir y le digo 300 millones, ahí llega un general y Pinochet le dice que nos pase el dinero, pero el general le dice que no hay dinero. Pinochet va y le insiste: 'No le estoy preguntando si hay dinero, le digo que se los pase'. Este general se mantiene firme y le recalca que no hay dinero, se gastaron todos los recursos. Esto terminó que todo quedó en nada", aseguró.
De todas formas el ex presidente albo reflexiona diciendo que "fue un acto publicitario que cualquier Gobierno hubiera hecho, estaba de cajón".