Una infartante mañana dominical vivieron los fanáticos de la Eurocopa, con el partido que se vivió entre Inglaterra y Eslovaquia, válido por los octavos de final del certamen.
En teoría, los ingleses eran los favoritos para quedarse con el paso a cuartos, tomando en cuenta su nutrido plantel, y que había terminado libre de su grupo con 5 puntos, a diferencia de los eslovacos que clasificaron como uno de los mejores terceros.
Pero los halcones golpearon primero e instalaron la sorpresa en el Veltins-Arena, ubicado en Gelsenkirchen, gracias al gol de Ivan Schranz en el minuto 25.
Pasaban los minutos y el elenco dirigido por Gareth Southgate no encontraba la fórmula para evitar la eliminación y no emular lo que hizo Italia el sábado, al caer inapelablemente ante Suiza.
Los esfuerzos dieron resultado en los descuentos, cuando Jude Bellingham aprovechó un saque lateral y un pivoteo para definir en el área con una chilena, cuando solo faltaban dos minutos para el final.
Gracias a la conquista de la estrella del Real Madrid, el combinado inglés forzó el alargue. Aprovechando el impulso del empate de Bellingham, lograron anotar el 2-1 en solo un minuto, gracias a un cabezazo de Harry Kane.
De esta manera, Inglaterra logra posicionarse en la ronda de ocho mejores, buscando volver a la final que disputó hace cuatro años ante precisamente Italia. En cuartos se enfrentará al verdugo de la azzurra, Suiza.