Celeste Arantes, madre del icónico astro brasileño, Pelé, está afrontando el golpe más duro de su vida. A sus 100 años, Doña Celeste, comenzará a prepararse para brindarle el último adiós a su primer máximo orgullo, que falleció este jueves a los 82 años producto de un cáncer que lo aquejaba hace un tiempo.
Durante el pasado 20 de noviembre, la progenitora del futbolista más importante en la historia celebraba su cumpleaños 100 y su hijo, le había dedicado un emotivo mensaje.
"Hoy celebramos los 100 años de vida de Doña Celeste. Desde pequeño ella me enseñó el valor del amor y la paz. Tengo más de cien razones para estar agradecido por ser tu hijo. Les comparto estas fotos, con mucha emoción para celebrar este día. Gracias por estar cada día a tu lado, madre", había señalado Edson Arantes do Nascimento.
La mujer atravesó duros momentos junto a Pelé. Muchas veces se ha recordado que el brasileño y su familia fueron personas de muy escasos recursos. De hecho su madre comenzó trabajando como empleada domestica para poder solventar los gastos de la familia y así que no le faltara nada a Edson, Zoca y María Lucía, sus tres hijos.
Las aprensiones de Doña Celeste con el fútbol
Antes de que Pelé se transformara en el futbolistas más importante en la historia del fútbol mundial, deseaba poder convertirse en piloto de aviación. Sin embargo, la caída de un avión cerca de su casa, dejó un importante número de personas fallecidas, descartando así la idea de convertirse en piloto.
En esa línea, su padre comenzó a inculcarle que fuera futbolista, pero Doña Celeste no estaba muy de acuerdo con eso y creía que lo mejor era que Pelé fuera piloto. La madre del pequeño Edson, pensaba que el fútbol era el camino a la pobreza.
Sin embargo, la vida tenía preparado puros éxitos a Edson Arantes, que junto a su padre y su madre, pudo conseguir convertirse en el mejor jugador en la historia, un legado que muy difícil podrá ser superado.